La FIFA se ríe de la petición de clemencia de Bartomeu con Arda Turan

Anoche se supo en Roma que Josep Maria Bartomeu, presidente del FC Barcelona, tiene la intención de pedir clemencia ante la FIFA en el caso de que se confirme la gravedad de la lesión de Rafinha. El objetivo de Bartomeu es presentarse ante Blatter para que le permita inscribir a Arda Turan en la competición desde ya para suplir al lesionado.

Se trata de una medida de gracia que no contempla la FIFA, inflexible históricamente en sus decisiones. Por eso los rumores que han llegado a Zúrich desde Roma han causado sorpresa entre los responsables del máximo organismo internacional. Bartomeu alegará causas humanitarias, pero la FIFA entiende que una jugada desgraciada no es motivo suficiente para revocar una decisión de sus comités de disciplina. De ahí, que se hayan tomado a broma esa posibilidad.

Además, en la FIFA no figura el Barcelona en la lista de sus clubs "amigos". La campaña de prensa organizada por el departamento de comunicación del club azulgrana entre sus medios afines para hacer quedar al Barça como la víctima de una injusticia y a la FIFA como un organismo perverso y malévolo no ha sentado nada bien en los despachos de Zúrich, que no sólo no cederán ante la petición de Bartomeu, sino que tiene en marcha la maquinaria para imponer una nueva sanción que podria ser histórica si se confirma  la investigación que tienen en marcha sobre nuevos datos recopilados que indicarían que en el club azulgrana, lejos de asumir su pecado y aplicar un propósito de enmienda, se mantiene en la puesta en práctica de nuevas irregularidades. La reincidencia, si finalmente puede probarse, podría resultar fatal para los intereses del club azulgrana.