Sergio Ramos traga saliva: Florentino Pérez pone 300 millones para revolucionar el Real Madrid

Sergio Ramos traga saliva: Florentino Pérez pone 300 millones para revolucionar el Real Madrid

El de Camas tiene un problema

Sergio Ramos puede ver en peligro su rol de ‘capo’ del Real Madrid. El capitán, tras la marcha de Cristiano Ronaldo, se ha convertido en la mano derecha de Florentino Pérez a la hora de tomar decisiones.

Pero lo cierto es que las recomendaciones del sevillano no han salido precisamente bien. Ramos fue el que recomendó al presidente dar el OK a la venta de Cristiano Ronaldo y apostar por Isco y Asensio, que no han rendido, y el que eligió a Julen Lopetegui como relevo de Zinedine Zidane.

Pérez ya se ha dado cuenta de que lo mejor que puede hacer el ‘4’ es liderar el vestuario y dedicarse a jugar a futbol. Del resto, ya se encarga ‘Flo’. Algo que Sergio lleva peor que mal.

Su ‘status’ de ‘mimado’ de Florentino lo ocupará Neymar Junior, el gran anhelo del mandatario blanco desde hace muchos años, cuando este aún estaba en el Santos de su Brasil natal.

Pero ‘Ney’ decidió elegir el Barça, club del que salió hace casi dos años con destino al PSG, donde aún milita. Pero su estancia no durará mucho más.

Los problemas económicos que atraviesa el cuadro parisino, que necesita recaudar fondos para no ser excluido de competiciones europeas, pueden impulsar la venta de sus grandes estrellas. Y, antes que deshacerse de Kylian Mbappé, prefieren hacerlo con el brasileño.

El ex jugador azulgrana sería el líder del Madrid sobre el terreno de juego y ocuparía el hueco que dejó libre CR7, tanto a nivel deportivo como a nivel de marketing.

Una operación que, entre pagos y comisiones, se elevaría hasta la friolera de 300 millones de euros, lo que le convertiría en el traspaso más caro de la historia, y que no cuenta con el visto bueno de Ramos, que considera a Neymar un jugador sobrevalorado y excesivamente caro.

Además, no gusta ni un pelo su poco compromiso, su afición a la fiesta, su tendencia con las lesiones y su fama de piscinero. Prefiere mil veces antes a Mbappé, algo más barato, seis años más joven y al que ve con más nivel y potencial.

Pero Florentino solo quiere a Neymar.