Portazo a Florentino (y de los que pican) el fichaje cantado que rechaza aterrizar en el Real Madrid

Varapalo para Florentino Pérez. El presidente del Real Madrid ya trabaja con vistas a la temporada que viene y negocia por varios cracks, con la esperanza de armar un equipo galáctico y competitivo.

Con varios fichajes ya cerrados, como Eder Militao, Mario Hermoso o Exequiel Palacios, ‘Flo’ se centra en encontrar salida a varios descartes, como Bale, Isco, Marcelo o Vallejo, y en nuevas contrataciones, como Hazard, Neymar o Icardi.

Para el Madrid 2019-2020 también había hueco para Rodrygo, un futbolista que es propiedad del equipo blanco desde hace un año, cuando lo ficharon del Santos a cambio de 45 millones de euros.

Una operación prácticamente calcada a la de Vinicius Junior. Ficharlo siendo apenas un adolescente, con 16 años, y dejarlo cedido en su club de origen hasta que cumpla la mayoría de edad, momento en el que, legalmente, podría cambiar de continente.

Viendo el buen rendimiento que ha dado ‘Vini’, tenían trazado el mismo plan para Goes, que parece haber superado sus problemas en la espalda y se ha erigido como pieza clave para Jorge Sampaoli en el club brasileño.

La intención era, y es, realizar la pretemporada con el primer equipo, donde se valoraría su rendimiento sobre el césped contra equipos de primer nivel y su compenetración con los compañeros.

Como llegaría en edad juvenil, tendría ficha del filial, aunque entrenaría a diario con la primera plantilla. Al igual que Vinicius, las primeras semanas jugaría con el Castilla para ir adaptándose al futbol español.

Para, si todo va bien, acabar la temporada ya consolidado como un miembro más del Real, como Junior, que ya es pieza clave. Pero Rodrygo tiene otros planes y así se lo ha hecho saber a Pérez.

No quiere ser ‘el nuevo Vinicius’. Quiere ser Rodrygo y seguir su propio camino, y considera que la mejor fórmula es seguir en el Santos, al menos, una temporada más, para seguir creciendo.

Su intención es aterrizar en Chamartín consagrado como una estrella de primer nivel, y no como una joven promesa. Para jugar en el Castilla, en Segunda División B, se queda en Brasil, en primera división y en el club de toda su vida.

Cuidado.