Sorpresa galáctica: el banquillo al que opta José Mourinho (y su entrenador no estaba en peligro)
El portugués puede tener una oportunidad.
No hay un puesto de trabajo tranquilo para los directores técnicos que se encuentran en la élite, los más experimentados saben que una victoria solo es cumplir con la misión básica, pero una derrota en un momento crucial puede significar su destitución inmediata o salida a corto plazo de los planes de la presidencia del club.
En ocasiones la mayor dificultad de dirigir a un club grande no es la forma de alinear a los jugadores o plantear un esquema táctico, sino el manejo del vestuario con futbolistas que quizás sepan cada cosa que quieran enseñarles y que se muestran renuentes a seguir reglas.
En el PSG hay dos cracks que prácticamente controlan el club, ya que para Nasser Al-Khelaïfi son la puerta al éxito que tiene la institución en Champions, por esta razón todos sus deseos se han convertido en órdenes para los directivos franceses.
La felicidad de Neymar y Mbappé dependían del desenlace final en la Champions League, el cual esta temporada no ha sido diferente, por lo que el descontento es insostenible de ambos pesos pesados, y ya presionan para salir en verano. El club ha decidido quemar uno de los últimos cartuchos que quedaba a disposición con la propuesta de fichar a José Mourinho, un técnico que no tiene el estilo más vistoso, pero que a donde quiera que va logra las victorias que son necesarias para ser influyente.
El actual estratega del PSG, Thomas Tuchel, hasta hace pocos días no estaba en peligro, sin embargo, esa debacle contra un Manchester United que no tenía a uno de sus mejores jugadores en el medio campo por suspensión, terminó de causar la pérdida de todo el crédito que había estado acumulando.
Mourinho es lo único que podría frenar una fuga masiva de talentos del equipo parisino para la siguiente temporada.