Lo que el vestuario no quiere contar de las faltas y penaltis de Leo Messi
En el seno de la plantilla azulgrana consideran que el crack argentino se ha ganado sobradamente el derecho a contar con preferencia para transformar esas opciones
En el vestuario del Barça lo tienen muy claro: Leo Messi tirará las faltas y los penaltis siempre que quiera. No se atreven a decirlo una y otra vez públicamente por si algún malpensado pudiera interpretar que el argentino impone su capricho. Simplemente, sus compañeros consideran que se ha ganado el derecho a hacerlo. Nada más. Es el mejor jugado del mundo y no hay discusión posible en ese aspecto.
El Barça cuenta con muy buenos lanzadores a balón parado. Neymar lo demostró hace algunos días con su gol de falta directa al Atlético en el Calderón. Pero, si Messi está en el terreno y pide el balón, es todo suyo. Y con los penaltis ocurre lo mismo. A nadie en el Real Madrid se le ocurriría decirle a CR7 que deje de tirarlos y la competencia que existe entre los dos cracks es tan grande que cuesta imaginarse al argentino renunciando a tratar de transformar una pena máxima. Pero eso ya ha pasado. La temporada pasada, en plena carrera por el Pichichi con el portugués, le cedió el lanzamiento a Neymar después de que, poco antes, le hubiera quitado un gol casi hecho ante el Córdoba. En la Copa del Rey, ante el Villarreal en el Camp Nou, también le dejó en sus manos un lanzamiento desde los 11 metros, si en en esa ocasión el brasileño acabó errando el tiro.