El detalle más revelador de la pesadilla que vivió Benítez ante el Málaga

Minuto 59 del Real Madrid - Málaga. Con 0-0 en el marcador, Jesé Rodríguez falla una ocasión muy clara al rematar mal una pelota con la portería semi vacía dentro del área andaluza. Le pega al césped y el balón sale mordido, por encima del travesaño. Mala suerte para el canario, que fallaba su tercera ocasión clara de la tarde cuando más le urge marcar para recuperar la confianza perdida de parte del madridismo y de su entrenador. Pero eso no fue todo. En esa acción, Jesé cae lesionado y sale del césped en camilla, llorando, entre aplausos del público. Entonces entra Kovacic, un cambio que ya sobrevolaba el ambiente por cómo transcurría el choque.

El empate que entonces mostraba el electrónico ya era motivo de angustias y nervios en el Bernabéu, que esperaba que alguien abriese la lata del Málaga en la media hora que restaba para acabar. Pero el equipo blanco lo intentaba sin éxito y sin ideas, abocado a centros sin mucho sentido al área blanquiazul por parte de Marcelo y Carvajal. A Rafa Benítez le quedaban dos cambios por hacer, con Arbeloa, Cheryshev, Lucas Vázquez, Casemiro y Marcos Llorente en el banquillo, además del portero suplente, Kiko Casilla. No hizo más sustituciones.

No han sido pocos los que se preguntaron por qué, por ejemplo, el técnico no introdujo a un especialista en la finta, el regate y la entrada por los costados como Lucas para tratar de romper las líneas defensivas del Málaga. "Teníamos el dominio y no queríamos meter a más gente en el medio. Se podía meter energía, pero no era el tema, era precisión. Los que estaban en el campo estaban bien", explicó el entrenador en rueda de prensa. Pero lo cierto es que no han sido pocos los medios y los analistas que echaron en falta alguna reacción más desde el banquillo ante lo que estaba pasando.

Benítez, de momento, se había caracterizado por hacer los cambios durante los partidos de forma bastante rápida, algo que estaba gustando y que difería de lo hecho habitualmente por su predecesor, Carlo Ancelotti. Este cambio de actitud abre el debate de la falta de recursos en ataque. Las lesiones de Bale y James dejaron un banquillo algo falto de talento en los metros finales, cuando parecía que este iba a ser un cambio total en cuanto a que sería imposible quejarse de la falta de fondo de armario en la plantilla del Real Madrid. Tampoco se tiró de cantera. ¿Un error por parte de Rafa?