La relación de amor-odio entre Miku (apartado) y Paco Jémez viene de lejos

En su día, el técnico ya se las tuvo con el futbolista vinotinto y luego se lo 'impusieron' desde la directiva

La relación de amor-odio entre Miku (apartado) y Paco Jémez viene de lejos

Un fin de semana más, Nicolás Fedor 'Miku', delantero del Rayo Vallecano, se quedó sin un solo minuto de participación en el choque que enfrentó a los vallecanos con el Sevilla en el Sánchez Pizjuán. El venezolano no está contando para nada en los planes de Paco Jémez en este inicio de temporada y no es algo nuevo. Parece que tiene pocas posibilidades de jugar en el equipo franjirrojo y por ello se han disparado los rumores sobre su posible salida en el mercado invernal, algo que el propio técnico ha querido desdramatizar en los últimos días: "Miku es un chico trabajador y sé que no se va a venir abajo por esta situación. Ahora creo que Javi y Manucho tienen que estar y él debe esperar su oportunidad porque la va a tener".

 

Pero la cosa es que dicha oportunidad no llega. Y es que la relación entre el entrenador del Rayo y Miku siempre ha sido complicada. Pocos se acordarán de que, en 2012, jugador y técnico tuvieron un rifi rafe considerable cuando el futbolista militaba en las filas del Celtic de Glasgow. Los escoceses ganaron al Barça en su estadio por 1-0 en la Champions con un planteamiento muy defensivo, y Jémez lo criticó dando su opinión. Miku contestó: No hago caso a Paco Jémez, pero si vi que el Barça le metió cinco... cuando juegue Champions que haga lo que quiera". "O no me ha entendido, o es que es tonto", replicó el técnico, todo esto a distancia. "No quise faltar al respeto al Celtic porque desde el punto de vista defensivo hicieron un partidazo. Dije que a mí se me caería la cara de vergüenza porque yo aquí llegué diciendo que jugaríamos de una determinada manera y no puedo cambiarla porque llegue el Barça".

 

El caso es que Miku aterrizó de nuevo en Vallecas en enero y ya se vio que no iba a ser un camino de rosas para el delantero: "Si quieres saber algo de él (Miku) le preguntas al director deportivo. No tengo nada que ver. Me han traído un jugador, lo pongo a entrenar, intentaré que se integre en el grupo y demás, pero eso te podrá informar el director deportivo, que ha sido un fichaje de la dirección deportiva. Cualquier cosa que quieras saber de Miku a mí no, al director deportivo. Es un jugador más, una opción más, va a entrenar, intentaré sacarle el máximo rendimiento. Si me demuestra que es mejor que los que están aquí jugará y si no será un compañero más. Lo hemos recibido con los brazos abiertos y estamos encantados de que esté aquí con nosotros". No parece el mejor de los comienzos, o el más caluroso.

 

Poco le queda a Miku para tratar de convencer al técnico de aquí al mercado invernal. De lo contrario, podríamos estar ante sus últimas semanas como futbolista del Rayo.