Caras largas en el vestuario del Barça: Así no se gana la Champions League

Los propios jugadores son conscientes de que el 0-2 no tapa las carencias que mostró el equipo ante el Bate Borisov.

Caras largas en el vestuario del Barça: Así no se gana la Champions League

Caras largas al final del partido de Bielorrusia a pesar de la victoria. El regreso de la expedición barcelonista de Bielorrusia no escondió la autocrítica entre los jugadores barcelonistas, que ven que este Barça no chuta y no acaba de coger la onda ganadora que el pasado año le sirvió para ganar el triplete. Los dos goles de Rakitic, de muy bella factura, no ocultan las carencias de un equipo que tiene problemas para convertir en gol las ocasiones que se crean desde atrás.

 

Los hombres de Luis Enrique son conscientes de que lo de ayer fue un partido de entrenamiento. El Bate Borisov no fue rival en ningún momento, apenas creó peligro ni se atrevió a tutear al equipo azulgrana como por ejemplo hizo el Rayo Vallecano en el Camp Nou. Los resultados están tapando muchas carencias. Ante el Rayo la reacción sólo fue posible a base de penaltis y ayer el Barça volvió de Bielorrusia con un correcto 0-2 que debió ser 0-12 a tenor de lo que se vio sobre el terreno de juego. Y los jugadores entienden que esta no es la manera de ganar la Champions League. No tienen las mismas sensaciones que experimentaron la pasada temporada cuando iban superando rival tras rival, ronda tras ronda en la competición más prestigiosa del fútbol continental.

 

El vestuario azulgrana es consciente de la situación y de que hay que sacar adelante como sea los partidos que restan antes del clásico y de la vuelta de Iniesta y Messi. Lo que queda hasta el 21 de noviembre será decisivo en la suerte del Barcelona esta temporada. Ahí se lo juegan todo.