La Bundesliga acoge a otro "olvidado" de la afición española

Jonathan Soriano ha sido noticia en las últimas horas por afirmar que no piensa en volver a la Liga española. En sus palabras se adivina cierta frustración por no haber sido reconocido en su propio país como lo está siendo en las filas del Red Bull Salzburgo, donde lleva ya varias temporadas despuntando como uno de los mejores goleadores de toda Europa. Pero en el viejo Continente hay otros futbolistas españoles que, en su día, tuvieron que dejar sus equipos de origen y que están cumpliendo con creces en otras ligas. Uno de ellos visita Sevilla este jueves para disputar un encuentro de la Europa League.

Se trata del central Álvaro Domínguez. De pasado atlético, Domínguez regresa esta noche a España y al Sánchez Pizjuán como titular indiscutible de la zaga del Borussia Moenchengladbach, equipo en el que lleva ya tres temporadas. En una entrevista concedida al diario El Mundo, el madrileño habla de, entre otras cosas, sus expectativas de futuro y sus opciones de volver a casa. También de las posibilidades de contar para Vicente del Bosque. La selección no anda sobrada de defensas y Domínguez se ha ganado un puesto de reconocimiento entre los centrales más regulares de la Bundesliga. Sin embargo, también ofrece cierta frustración a la hora de hablar.

"No espero que me llamen. Han tenido la oportunidad de hacerlo y no lo han hecho, así que no lo espero. Yo voy a seguir jugando bien y si algún día llega, mejor, pero esperar a algo no es lo correcto. Creo que jugar en el extranjero penaliza. Obviamente, a los que juegan en el Bayern se les oye en la prensa, pero a los que estamos en el cuarto o quinto equipo de la Bundesliga se nos tiene menos en cuenta, aunque algunos tengan el mismo o más nivel que algunos jugadores en España", afirma.

¿Es esto cierto? Revisando la última convocatoria de enjundia de Del Bosque, la definitiva de cara al pasado Mundial de Brasil, 9 de los 23 convocados pertenecían a equipos de fuera de España. Y no todos punteros, como es el caso del Nápoles, que hasta el desembarco de numerosos españoles no era un conjunto muy seguido en nuestro país. Los "extranjeros" representaron casi un 40 por ciento del total de la convocatoria para la cita mundialista.

"Me gusta la calidad de vida y el fútbol de España. Pero, por el momento, estoy a gusto en Alemania. No tengo en mente volver", zanja el jugador.