El "suceso" de Getafe abre una grieta entre la plantilla y la directiva

El comunicado en el que los jugadores piden disculpas no ha llegado por iniciativa de la plantilla, sino que lo ha impuesto Bartomeu.

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Josep Maria Bartomeu contempló horrorizado las imágenes de diez jugadores del FC Barcelona dando la nota en Getafe y faltando el respeto al equipo local, que acababa de perder ante el Barça en el coliseo Alfonso Pérez. Bartomeu organizó una cumbre telefónica con su alto mando y por unanimidad se acordó redactar una nota pública firmada por los jugadores pidiendo perdón por lo sucedido en Getafe. Bartomeu considera que esas imágenes no guardan relación con los valores que debe transmitir el FC Barcelona y que la grandeza del club se ha de medir tanto en el momento en que llegan las derrotas como en la celebración de las victorias. Dicho comunicado no surge de la iniciativa de los jugadores, sino del deseo de la directiva de quitarle hierro al asunto. En la misma se puede leer:

 

"Ante la reacción que ha provocado la iniciativa que emprendimos para celebrar la victoria y el buen momento del equipo coincidiendo con la noche de Halloween, la plantilla del primer equipo de fútbol del FC Barcelona quiere manifestar que:

  1. En ningún caso fue nuestro ánimo ofender y molestar a ningún compañero del equipo del Getafe.
  2. La irrupción en la zona mixta coincidiendo con la rueda de prensa de Víctor Rodríguez fue una desafortunada casualidad involuntaria, por la cual le pedimos disculpas personalmente y le expresamos nuestro respeto. Las imágenes grabadas en ese momento demuestran que uno de los jugadores participantes dijo textualmente: "¿A dónde vamos? Que nos hemos equivocado”.
  3. Esta plantilla es consciente de la responsabilidad que implica ser jugador del FC Barcelona y quiere mostrar sus disculpas a quien se haya podido sentir ofendido, especialmente a los miembros del equipo y a los seguidores del Gefate. Nuestro compromiso es también irrenunciable con los socios y seguidores del FC Barcelona, que deben poder sentirse orgullosos de este equipo también fuera del terreno de juego".

 

Entre una parte de los jugadores protagonistas de la acción no ha sentado bien esta imposición de la directiva, que ha generado un mal rollo evidente y ha abierto una brecha importante en las relaciones entre ambas partes. Los jugadores siguen convencidos de que están en su derecho de celebrar la victoria relacionándola con la festividad de Halloween. Algunos dan por buena la redacción del comunicado realizado por el club, pero a otros les ha sentado muy mal porque siguen convencidos de que no es necesario pedir perdón por una broma sin maldad.