CR7 protagonizó las habladurías en el vestuario tras ganar a Las Palmas

Cristiano no se siente en plenitud. El luso vio puerta en la victoria del Real frente a Las Palmas, pero volvió a estar lejos de su mejor versión. CR7 no termina de encontrarle el pulso a la temporada, una realidad que no ha pasado desapercibida por el propio protagonista que, pese a marcar, no evidenció la felicidad de otras gestas. Tras el encuentro, cuentan desde dentro, la cara de Ronaldo no era de alegría, al contrario: la exigencia de Cristiano con su persona está fuera de lo común: el luso lleva demasiados encuentros sin ser el líder que necesita el equipo. No ofrece su mejor versión, ni es el crack resolutivo que necesita el Madrid.

El protagonismo en el equipo con Benítez al mando está siendo más repartido que en años anteriores, como el último, cuando el '7' cargó con el peso del equipo a sus espaldas. Algo que, lejos de ser una responsabilidad demasiado pesado, el crack necesita: Ronaldo, afirman, sufre cuando los parabienes/aplausos van en dirección contraria a su persona. Cristiano necesita la reafirmación partido sí, partido también, de que sigue siendo el mejor entre suyos, algo que el grupo ya no percibe por igual: nadie en el Madrid niega la aportación de CR7 al equipo, del mismo modo que cada vez son también más las voces que advierten de un Cristiano menos resolutivo/determinante que en campañas anteriores.