Desmontando las alternativas a Pogba: Sólo dos interesan a Luis Enrique
Fichar a una promesa del fútbol europeo a bajo coste para cubrir la ausencia de Xavi sería tanto como admitir el fracaso de La Masía para proporcionar jugadores al primer equipo.
La desaparición del FC Barcelona de la carrera por el fichaje de Paul Pogba ha servido para que los medios de comunicación especulen con diversos nombres como alternativa al centrocampista francés de cara al mercado de verano. Son muchos los nombres que han aparecido publicados como objetivos de la secretaría técnica del club: Marco Verratti (PSG), Koke (Atletico), Gundongan (Borussia Dortmund), Richedley Bazoer y Davy Klaassen (Ajax), Julian Wiegl (Borussia Dortmund), Youri Tielemans (Anderlecht). André Gomes (Valencia) o Hakan Çalhanoglu (Bayer Leverkusen).
De las listas que circulan, sólo dos jugadores cuentan con la bendición de Luis Enrique: Marco Verratti y Koke. Los dos perfectamente capacitados para desarrollar en el Barcelona las funciones de Xavi Hernández, que no ha dejado heredero en la plantilla blaugrana. Pero el problema siempre es el mismo. El precio. El PSG no soltaría a Verratti por menos de 80 millones. Y el Atlético no dejaría escapar a Koke por menos de 60. Los tiempos de alegrías económicas en el Barcelona acabaron con el desembolso de 81 millones que se realizó hace dos veranos por Luis Suárez. Ahora toca apretarse el cinturón, por lo que Bartomeu ya le ha dicho a Luis Enrique que si insiste en Verratti o Koke, que vaya haciéndose a la idea de que sería el único fichaje del próximo mercado de verano, ya que en invierno no está previsto reforzar la plantilla.
De cualquier forma, los deseos de Luis Enrique están bien vistos por la directiva. Contratar a una joven promesa como los nombres que aparecen en las listas de la prensa (Bazoer, Klaasen, Wiegl o Tielemans) sería tanto como asumir que la producción de La Masía no da para cubrir las necesidades del primer equipo. Para fichar a una promesa, que resultaría como un melón sin abrir, ya tenemos a Samper. Es lo que se opina en los despachos del Camp Nou.