Primero CR7, luego Ramos y ahora James: Benítez se gana otro 'enemigo'

El madridismo no gana para 'episodios' entre distintos jugadores de la plantilla blanca y Rafa Benítez. Con o sin intención, lo cierto es que las reacciones del entrenador y de los futbolistas antes y después de los partidos, cuando hablan sobre los mismos o sobre los planteamientos técnicos, dan lugar a que se hagan conjeturas de todo tipo. Un aspecto que el club debería cuidar con el objeto de que no se alimenten teorías que aseguran que no hay una buena sintonía con el 'método Benítez' en la plantilla.

Nada más aterrizar en el Real Madrid, Benítez 'se las tuvo' primero con Cristiano Ronaldo, al que no terminaba de colocar en el primer escalafón de importancia del club. "Está entre los mejores del mundo" decía Rafa, un discurso que casa poco con el que todos habían mantenido antes que él en la entidad. Hasta que cambió el chip: "Es nuestro Pau Gasol", llegó a asegurar. "Es el único intocable", dijo también. Siempre negando la mayor sobre si ha tenido problemas con él, lo cierto es que su cambio de discurso en cuatro meses ha sido más que notable. Dijo que no le temblaría el pulso a la hora de sentarle, algo que todavía no ha hecho.

Sus encontronazos con Sergio Ramos han sido más directos. Tras empatar en el derbi del Calderón, Benítez fue claro "No me gustó el error del penalti", en referencia a una acción del central. Sergio contestó a su llegada a una concentración de la selección española: "Los errores son humanos. Todos los cometemos y nadie los comete queriendo. Con el 0-1 estás pensando en que tenías el partido y en vez de adelantar líneas y conseguir un gol más, inconscientemente defiendes más y retrasas las líneas. Quizá eso hizo que empatásemos. El Madrid es esto. Igual que se habla de mi error, se hablará de los cambios del entrenador. Para lo bueno y para lo malo, hay que estar preparado y quien no lo esté que cambie de equipo o que cambie de profesión". Costó una charla en privado entre los dos. Tras el duelo ante el PSG en el Bernabéu también hubo diferencias. Para Benítez el Madrid hizo un buen choque. Para el defensa, "todos debían" hacer autocrítica. Lo mismo sucedió tras la derrota en el Pizjuán este domingo.

El último en sumarse a esta extraña disparidad de criterios en declaraciones públicas ha sido James Rodríguez. El colombiano fue sincero (quizá demasiado) horas antes del partido contra el Sevilla: "Estoy bien. Hace más de 15 días que estoy recuperado y apto para dar todo". Benítez practicó un discurso algo distinto tras la derrota. "Ya habéis visto quien es James. Es un gran jugador pero aún le falta mucho ritmo para ser el que fue".

Demasiadas coincidencias, demasiados errores de comunicación que contribuyen a generar un panorama complicado a dos semanas del Clásico ante el Barça.