Sergio Ramos avisa al Real Madrid: el vestuario se planta en junio

Los jugadores no quieren seguir aceptando ciertas situaciones que les vienen impuestas desde el club

Sergio Ramos avisa al Real Madrid: el vestuario se planta en junio

Enigmáticas declaraciones de Sergio Ramos nada más acabar el partido el pasado domingo en el Sánchez Pizjuán de Sevilla. El central del Real Madrid fue el primero en salir a la palestra para hablar de la primera derrota de su equipo en partido oficial esta temporada, después de que tuviera que salir del choque por una recaída en su lesión en el hombro justo después de marcar el 0-1 en la primera parte. "Cada uno que ponga el calificativo que quiera, está claro que en la segunda parte no se han hecho bien las cosas", fue su primera impresión de un partido que ha generado mucha controversia por las declaraciones entre Rafa Benítez sobre James y algunos de los comentarios que pudieron verse en los futbolistas sobre el planteamiento de su técnico.

 

Pero Ramos, hablando concretamente de su lesión -además de defender a Cristiano Ronaldo, señalado por su mal partido- dejó un mensaje velado cuyos destinatarios son los que mandan en las altas esferas del club... o al menos eso se deduce. El periodista Juan Gato destaca en 'vozpópuli' que dicho mensaje va directamente relacionado con la ruptura total existente entre el vestuario blanco y el jefe de los servicios médicos del club, Jesús Olmo, apadrinado de la directiva.

 

"Quizá no sea este el momento ahora (de hablar)... no voy a mentir. Pero es una realidad. Debemos intentar ayudarnos, llegar a final de temporada y poner los problemas encima de la mesa. Y entonces, cuando hablemos, los que podemos hablar más que otros, hablaremos". Ramos se refiere directamente a sí mismo como capitán del club, y carga contra la figura de un Olmo con quien el entendimiento es ya prácticamente imposible. Hace semanas que se filtró que los futbolistas desean impedirle el acceso al vestuario. La defensa a ultranza de Benítez de los servicios médicos también ha contrariado al grupo y ha potenciado aún más su distanciamiento.

 

A falta de saber qué sucederá en los próximos meses y a lo largo de la temporada, está claro que las cosas difícilmente seguirán así en el Real Madrid. El malestar entre la plantilla y las altas esferas por la serie de decisiones que se vienen tomando desde hace tiempo empieza a notarse sobre el césped.