Otro club italiano se suma al Inter en la puja por el barcelonista Pedro
Al ya conocido interés del equipo que dirige Roberto Mancini por hacerse con los servicios del delantero azulgrana la próxima temporada se une el de una Juventus que manda con puño de hierro en Italia
El futuro de Pedro Rodríguez puede estar en el Calcio, pero no necesariamente en el Inter de Milan. A pesar de que el conjunto neroazzurro se ha mostrado muy interesado en hacerse con los servicios del delantero azulgrana con vistas a la próxima temporada, dado que se trataría de una petición expresa de su técnico, Roberto Mancini, ha entrado en la puja otro clu que podría ser mucho más atractivo para el tinerfeño.
En este caso, se trataría de la Juventus de Turín, el equipo que manda con contundencia en la tabla de la Serie A. No en vano, con 67 puntos, le lleva 14 al segundo clasificado, la Roma. Aunque incorporaron al ex delantero del Athletic Fernando Llorente hace un par de temporadas, en el club turinés están mucho más contentos con el rendimiento que les está dando hasta el momento el ex madridista Álvaro Morata. Por eso, están dispuestos a renunciar al perfil de delantero tanque que encarna Llorente, quien podría acabar encontrando acomodo en el Sevilla si se marcha el colombiano Carlos Bacca, a cambio de incorporar a otro jugador rápido y habilidoso como sería Pedro.
El tinerfeño, uno de los puntales para Pep Guardiola durante la etapa de ex capitán del Barcelona al frente del banquillo azulgrana, apenas está contando con minutos en la presente temporada. La presencia en ataque de tres figuras de talla mundial como Luis Suárez, Neymar y Leo Messi, un hecho al que se une el extraordinario rendimiento que están ofreciendo los tres futbolistas en punta, le han llevado a perder peso específico en el equipo, algo que podría llegar a poner en peligro incluso su presencia en la Eurocopa del año que viene. Por ello, Pedro está más que dispuesto a cambiar de aires, y el club azulgrana podría aceptar su traspaso este mismo verano, a pesar de la prohibición de incorporar nuevos jugadores hasta enero de 2016 impuesta por la FIFA, dado que el jugador acaba su contrato el 30 de junio del año que viene.