El pacto del Clásico: Benítez tiene la cama hecha en el vestuario del Madrid

El pacto del Clásico: Benítez tiene la cama hecha en el vestuario del Madrid

El técnico sospecha que varios jugadores buscan su cese

Rafa Benítez puede hacerse el tonto, pero tiene ojos en la cara: el técnico blanco se huele algo extraño desde que empezó a correr el rumor en la caseta que el equipo se dejó ir en la segunda mitad contra el Barça por un pacto interno que buscaba la salida fulminante del técnico. Ahora, aquellos rumores que apuntaban a que varios jugadores del Real querían hacerle la cama al madrileño, ganan fuerza en el staff y empiezan a ser tomados muy en serio en las alturas.

 

Frente al Villarreal la falta de actitud, dejadez, indiferencia, de referentes llamados a liderar al equipo en cada una de sus líneas, disparó las alarmas. Rafa señaló la actuación de tres futbolistas como clave para entender la derrota encajada en El Madrigal. Tres jugadores enfrentados al técnico sin disimulo y que pusieron su salida del Real como la única opción para no cerrar un año en blanco. A saber.

 

Benítez terminó con la mosca detrás de la oreja por la floja aportación de un Sergio Ramos que, aunque volvía de una lesión, había insistido, casi exigido al entrenador, estar en El Madrigal. No di la talla. "Ramos es el capitán, pero está para jugar en el Castilla", espetaban voces informadas al término del choque.

 

En el medio campo, los palos fueron, una vez más, para un James con diferencias incurables con Rafa. El colombiano, santo y seña en las alturas, fue apuntado por un partido lejos de sus capacidades.

 

Y Ronaldo. Benítez no se siente la lengua de tanto mordérsela con el luso. Una de las últimas perlas que trascendió del técnico al portugués apuntaba que con "Cristiano estamos jugando con 10". Ante el Villarreal, CR7 volvió a ser el jugador alejado del liderazgo que necesita/demanda el equipo. Ronaldo, apuntan desde el cuerpo técnico, es un futbolista en descenso. De nada sirve meterle cuatro a un Malmoe de pandereta, o cinco a un Espanyol que 'flirtea' con el descenso, si en las grandes citas -Barça, Atlético, PSG, etc.- no se da la cara. Problemas mayores para Rafa.