El último movimiento del Barça que acerca a Nolito al Camp Nou

El último movimiento del Barça que acerca a Nolito al Camp Nou

Bartomeu confía en que sea el propio Luis Enrique quien desencalle la situación y acabe convenciendo a sus amigos del Celta para que suelten al jugador.

Lo último que desearía hacer Josep Maria Bartomeu es contrariar al técnico que le ha convertido en un presidente ejemplar obteniendo cinco títulos en su primer año de mandato oficial. Por eso, aunque el FC Barcelona no está en condiciones de afrontar ningún fichaje en este mercado de invierno desde el punto de vista contable, Bartomeu busca fórmulas imaginativas para darle satisfacción a Luis Enrique con la llegada de Nolito al Camp Nou en el mercado de invierno.

 

18 millones, el precio de Nolito, no pueden ser obstáculo para un club que se mueve con un presupuesto superior a los 600 millones de euros. sin embargo, lo cierto es que la directiva no puede estirar más el brazo que la manga en materia de gastos mientras no obtenga un incremento en los ingresos, algo que se está negociando con la renovación de los contratos con Qatar y Nike. A la espera de ese chorro de millones que abrirá la puerta a la inversión en fichajes en el próximo mercado de verano, el club ha cerrado el grifo para el gasto en jugadores en lo que queda de ejercicio contable hasta el 30 de junio.

 

Ante esta situación, Bartomeu ha propuesto al Celta la cesión de Nolito al Barcelona hasta el 30 de junio a coste cero. El 1 de julio el Barcelona se vería obligado a hacer efectiva la cláusula de rescisión del jugador, que es de 18 millones. Y en caso de no hacerlo, debería indemnizar generosamente al Celta por los seis meses en que se habrá visto privado del jugador. Es decir, el Celta ganaría dinero sea cual sea el desenlace de la operación, mientras que el Barcelona ganaria tiempo para incluir en el próximo ejercicio contable el gasto de la operación Nolito.

 

Bartomeu confía en que el Celta acabe aceptando su propuesta y cuenta para ello con la colaboración de Luis Enrique, que utilizará las buenas relaciones que mantiene con la directiva viguesa para cumplir con su sueño de tener de nuevo a Nolito a sus órdenes.