Laporta perfila quién será su entrenador si es elegido otra vez presidente

El que fuera máximo dirigente del Barcelona entre 2003 y 2010 está valorando un esquema técnico para el primer equipo en el que no se contempla la continuidad de Luis Enrique en el banquillo

Laporta perfila quién será su entrenador si es elegido otra vez presidente

Todavía no lo ha hecho público, pero en Barcelona pocos dudan de que Joan Laporta volverá a optar a la presidencia del Barcelona en las elecciones que tendrán lugar este verano. A pesar de que durante en su mandato hubo algunos altibajos (como una moción de censura en su contra impulsada por el socio Oriol Giralt, a quien Enric Masip, ex director técnico del balonmano azulgrana, ha relacionado con la actual junta o la polémica por la investigación con detectives a varios directivos, entre otros), el hecho de haber recogido un club básicamente hundido tras el mandato de Joan Gaspart y acabar encontrando el momento más alto de su historia de la mano de Pep Guardiola en 2009 le otorga una aureola especial entre los socios barcelonistas.

 

Laporta, además, encarna un perfil de presidente mediático, que no tiene problema alguno a la hora de aparecer en los medios y que se mueve casi como pez en el agua en esas circunstancias. Sandro Rosell le desbancó como presidente más votado de la historia del Barcelona en 2010 y es muy posible que el ex máximo dirigente barcelonista aspire a devolverle en cierto modo el golpe en los próximos comicios explotando su lado más carismático. Su personalísima manera de ser puede que le haya puesto en contra a muchos aficionados no sólo del club azulgrana, sino del fútbol en general, pero también le ha granjeado fieles seguidores.

 

El ex presidente está manejando ya una lista de posibles entrenadores para su proyecto. La primera vez que llegó al cargo, lo hizo con Frank Rijkaard bajo el brazo y el holandés ganó, entre otros títulos, dos Ligas y una Champions. Lo mejor, no obstante, se hizo esperar hasta el final de su mandato, con la sorprendente y exitosa irrupción de Pep Guardiola como técnico del primer equipo azulgrana. Mientras Laporta deshoja la margarita, tiene muy clara una cosa: Luis Enrique no seguirá al frente del primer equipo barcelonista. No hay buena sintonía entre ambos, a pesar de que el ex dirigente azulgrana apostó por él para que relevará a Guardiola como entrenador del filial barcelonista en 2008 y el asturiano consiguió ascender al equipo a Segunda A dos años más tarde.