Un cotizado central de altísimos vuelos se ofrece al FC Barcelona
El cuerpo técnico del club azulgrana valora la incorporación del crack del PSG de cara al próximo verano.
Marquinhos, a sus 21 años, es uno de los centrales más cotizados del mundo. Internacional con Brasil y triunfador en el fútbol europeo desde que alos 18 años empezó a jugar en Italia, fue reclutado hace tres años por el PSG tras su espectacular irrupción en la Roma. El Barça compitió entonces por su fichaje, pero pudieron más los dólares del PSG que la gloria que pudo haber encontrado entonces en el club catalán, que acabó contratando a Jeremy Mathieu y Vermaelen.
Ahora, Marquinhos vuelve a ponerse a tiro del Barça. Su condición de suplente de Thiago Silva y David Luiz en el centro de la zaga de Laurent Blanc, lo que le ha arrinconado al lateral como única alternativa a la titularidad, ha acabado con su paciencia y ahora contempla de forma decidida la posibilidad de un cambio de aires que le permite continuar con la imparable progresión mostrada hasta su llegada al equipo parisino.
Hasta el FC Barcelona ha llegado información confidencial que descubre que el central brasileño podria presionar para favorecer su llegada al Camp Nou si el club azulgrana estuviera interesado en contratar sus servicios. Marquinhos estaría encantado pudiendo jugar al lado de su íntimo amigo Neymar y haría lo que fuese posible para forzar su pase al Barcelona. El PSG pagó en 2013 32 millones por él a la Roma, aunque ahora estaría dispuesto a negociar su marcha por 20 millones. Se trata de un central con mucho futuro y mucho oficio pese a su juventud del que existen excelentes informes en la secretaría técnica del club.
Marquinhos ha manifestado a los medios franceses su disgusto por la situación que le ha tocado vivir en el PSG: "como todo el mundo, siempre pienso en integrar la alineación titular. Pero tenemos que respetar las decisiones del entrenador y su gestión. Voy a seguir trabajando para mí... Pero es verdad que llega un momento en el que me gustaría tener más protagonismo. No me acostumbro al banquillo, pero hay seis meses para ganar títulos y tratar de sostener al equipo en lo más alto. Luego veremos qué pasa". Más claro, el agua.