El Milan italiano piensa en Unai Emery para iniciar su revolución

El presidente del Sevilla, José Castro, empieza a no tenerlas todas consigo y sostiene que "todo puede ocurrir, aunque el técnico dice que está contento aquí"

El Milan italiano piensa en Unai Emery para iniciar su revolución

Desde Italia ligan el futuro de Unai Emery al banquillo del Milan. Y lo hace la prensa y en el seno del club rojinegro. El vicepresidente de la entidad lombarda, Adriano Galliani no se le ha borrado el nombre del técnico vasco de la cabeza desde que el pasado verano cayeran en saco roto las negociaciones para su fichaje. La cúpula del Milan tiene una espinita clavada y comienza a sentir que ha perdido un año.

 

La situación, entonces, era muy parecida a la de ahora. Emery terminaba contrato el 30 de junio pasado cuando recibió la llamada del Milan, pero tenía apalabrada su continuidad con el club de Nervión. El entrenador se encontraba con el equipo en la gira por Indonesia y Malasia, y la directiva sevillista supo actuar rápido para cerrarlo todo antes de su regreso. Nada más poner pie en Sevilla, el vasco dijo no al Milan y firmó su renovación por dos temporadas más en una comida celebrada el 28 de mayo con el presidente, José Castro, el vicepresidente, José María Del Nido Carrasco, y el director deportivo, Monchi.

 

En Milán, tuvieron que conformarse con una solución interna para su banquillo, la de Filippo Inzaghi y ahora los milanistas están fuera de la Copa y en el Calcio marchan en una discretísima octava plaza, con 38 puntos, a ocho del sexto clasificado, la Fiorentina…

 

Sin embargo, en este momento, Castro no las tiene todas consigo y ha declarado que "todo puede ocurrir, aunque no lo creo en vista a lo que él dice, y a lo contento que está aquí”. A Emery le queda un año más de contrato con los nervionenses y lo que se negocia ahora es una ampliación del mismo.

 

"Hablo con Emery un día sí y otro también, él no conoce nada de eso, son rumores del fútbol. Está muy contento con nosotros, incluso estamos en conversaciones con él para ampliar su contrato. No hay prisa, pero tampoco pausa. Ahora estamos enfrascados en lo importante, que son estas 10 ilusionantes jornadas de Liga que quedan. Lo que tenemos que ir es todos en la misma dirección. No paramos las negociaciones, pero vamos a centrarnos en lo importante", dijo el presidente.

 

Eso sí, manteniendo la famosa cláusula de liberación ante la posible opción de marcharse a un grande, opción que dejaría igualmente réditos económicos a la entidad de Nervión como fórmula de garantía o indemnización.