Luis Enrique baja el pulgar a uno de los pesos pesados del Barça

Dani Alves lo tiene crudo. El brasileño, con muy poco afecto en las alturas, está en la ‘pole’ para salir del Barcelona a final de temporada. El club, que frenó su marcha la pasada campaña por la sanción FIFA, ha recibido luz verde desde el banquillo para mover a Dani en el mercado.

Luis Enrique vive sumido en una decepción con Alves desde prácticamente el arranque del curso. De pasara a partirse la cara por el carioca a reconocer en ‘petit comité’ que desde que renovó es otro.

El bajón de juego del ‘6’ del Barça no pasa inadvertido en la caseta. La aparición de Aleix Vidal está pensada para ir rascando minutos al lateral en un cambio progresivo que debería perpetuarse del todo a final de campaña.

La ‘cantada’ de Alves en San Mamés que significó el gol del Athletic en la eliminatoria de Copa supuso un enfado tremendo a Lucho. Un detalle más, ni de lejos, el de mayor peso, que de crédito a los argumentos internos que avisan de un Dani desconectado.

Una realidad a la que se suma una ficha generosa que el Barcelona está interesado en perder de vista este junio para poder asaltar el mercado con garantías.

El ciclo de Alves se daba por acabado el pasado curso y, ahora, con contrato en vigor la ‘patata caliente’ se pasará a manos del jugador: o buscar una salida airosa o terminar siendo comparsa en el Barça. Se prefiere la primera opción.