Cristóforo se sincera tras su lesión: 5 confesiones y una ayuda providencial

El uruguayo ha admitido que ha atravesado momentos muy duros hasta poder volver a contar como titular en las alineaciones de Unai Emery

Cristóforo se sincera tras su lesión: 5 confesiones y una ayuda providencial

Cristóforo se está destapando como el mejor fichaje de invierno que ha podido hacer el Sevilla de Unai Emery. El futbolista uruguayo se ha convertido en una pieza fundamental en los esquemas del 'Catedrático' para el centro del campo del equipo andaluz contra todo pronóstico, después de superar una grave lesión de rodilla que le ha tenido apartado de los terrenos de juego durante meses, de que se dudara sobre si iba a volver a ser el jugador que apuntaba maneras cuando aterrizó en España e incluso tras dejar atrás algunos rumores que le situaban fuera del equipo en este mes de enero. Ya asentado, recuperado y feliz, contó en una breve entrevista para los compañeros de 'Estadio Deportivo' cómo ha vivido su recuperación durante todos estos meses. Recogemos sus impresiones más interesantes.

 

"Un día más, un día menos": "Esa frase lo resume todo. Así lo viví yo. Hay que pensar en positivo, y saber que te vas a recuperar y que estarás bien. Se dicen muchas cosas sobre este tipo de lesiones, pero uno tiene que pensar sólo en eso, que uno más es uno menos para volver. Dedicarte exclusivamente a la recuperación y en volver cuanto antes. El equipo me apoyó en todo momento y eso también es muy importante, recibir el cariño de todos y del Sevilla como club. Lo principal era recuperarme al cien por cien".

 

Momento en el que le dicen que tiene que volver a operarse la rodilla: "Venía de siete meses de recuperación y saber que todo lo que pasaste tienes que volver a vivirlo por segunda vez... Te preguntas el porqué. Esa pregunta siempre me la he hecho: ´¿Por qué a mí?´. Pero hay que ser positivo y volver a pensar en la recuperación, que ya sabes que es muy larga y de la que no sabes cómo vas a volver".

 

Malos momentos personales: "He llorado mucho, pero para mí. Cuando estaba solo, en esos momentos de soledad en los que no quieres nadie a tu alrededor; para dentro, guardándomelo para mí y haciéndole ver a la gente que está contigo que estás bien, que eres fuerte y que vas a salir para delante de todo esto".

 

A los que creían que no volvería a jugar en el Sevilla: "No sé si callar bocas, ya que no me gusta referirme así. Pero uno respondió, demostró que está bien, como yo ya sabía que estaba física y mentalmente. Sabía lo que podía dar y estoy muy contento por mí mismo, primero, y por la gente que me apoyó y que siempre me demostró su apoyo, después. Siempre estaré agradecido a ellos".

 

Su amigo y confidente: Nico Pareja: "Sí. Vivo solo acá, y cuando no tengo visita de mi familia o amigos Nico siempre ha estado ahí, dándome un gran ánimo y apoyo para estar fuerte. Somos vecinos y nos ha dado para hablar mucho de nuestras lesiones y para darnos ánimos; de ser positivos y de comentar los dolores y las molestias que teníamos, lo que nos pasaba a ambos".