Los nuevos dueños chinos no logran frenar el caos en el Espanyol de Caicedo

La situación deportiva no es el único problema para el equipo y el delantero ecuatoriano empieza a impacientarse ante la ausencia de decisiones

Los nuevos dueños chinos no logran frenar el caos en el Espanyol de Caicedo

Al Espanyol se le acumulan los problemas. A la complicada situación deportiva que atraviesa el club con la imperiosa necesidad de ganar contra el Deportivo para no verse metido en el pozo de los puestos de descenso, se le suman cuestiones de no menos importancia para el devenir del equipo.

 

El club sigue sin cerrar a un nuevo director deportivo y en la lista de tareas inminentes están los pagos con Hacienda, la ampliación de capital y la convocatoria de una Junta General Extraordinaria de Accionistas.

 

Pasan los días y por ahora el club sigue sin tener una pieza clave en cualquier club de fútbol: un director deportivo. Alguien que tome decisiones y que ante una situación delicada como la actual es imprescindible.

 

La intención del consejo que preside Mr. Chen es contratar a un profesional de prestigio para liderar un gran proyecto, ya que no podemos olvidar que el máximo mandatario espanyolista a su llegada afirmó que espera que el equipo esté en la Champions en tres años.

 

Parece que el nombramiento es inminente, pero la realidad dice que también lo era hace una semana y que un no ha llegado nadie para suplir al ex director deportivo Oscar Perarnau. Así pues, habrá que esperar a que aterrice Chen para tomar la decisión final.

 

Aunque esta no es la única decisión que deberá tomar el nuevo presidente a su llegada, puesto que hay que tener en cuenta que mañana Galca vuelve a jugarse su puesto.

 

De momento, todo se encuentra en el aire y, mientras, su estrella Caicedo empieza a impacientarse. El delantero ecuatoriano se comprometió con el club, al firmar un nuevo contrato, rechazando ofertas más importantes, pero ya avisó con una frase lapidaria: “Si bajas a Segunda no hay proyecto que valga”.

 

O el Espanyol se pone las pilas o a los mencionados problemas se le va añadir otro más.