La victoria que refuerza el mando de Zidane en el vestuario del Madrid
El técnico francés impondrá su criterio en un aspecto sobre la plantilla a pesar de la opinión de las altas esferas del club
Zinedine Zidane quiere que el efecto de su gestión al frente del Real Madrid no se quede en "abracitos", eso que Cristiano Ronaldo escenificó muy bien tanto en la previa como durante el partido entre los blancos y la Roma en el Olímpico. Sabe que su gran baza ahora mismo con los futbolistas, su empatía con el grupo y su figura como leyenda y ex futbolista del club que entiende a los jugadores, acabará perdiéndose con el tiempo y que necesitará más argumentos para perpetuarse en el banquillo. Argumentos futbolísticos, y una plantilla acorde a sus exigencias. Por eso, tomará decisiones... aunque alguna de ellas no guste a la directiva.
Y parece que una ya la ha tomado, y el club ha tenido que "tragar" con ello. Se trata de la venta de Pepe el próximo verano. El central portugués, de 33 años, sería uno de los pesos pesados sacrificados cuando acabe la presente temporada. ¿Los motivos? Su edad, su progresiva pérdida de rendimiento y los largos periodos que pasa lesionado debido a su veteranía. No es que se haya convertido en un lastre, pero 'Zizou' quiere dar ya el relevo completo a Varane y Ramos y para el Madrid será la última oportunidad de sacar dinero por el central.
Pepe no era un jugador al que la directiva quisiera vender. Sobre todo porque, según cuentan algunas fuentes, se trata del mejor confidente de Florentino Pérez en el vestuario. Hecho que precisamente le ha alejado un poco de algunos otros pesos pesados del grupo, como Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo, siempre según algunos medios en las últimas semanas. Pero se impondrá el criterio de Zidane, que cuenta con la confianza del club para llevar a cabo la remodelación de la plantilla pensada para la próxima campaña.