Un secundario de lujo: el rendimiento de Jérémy Mathieu tapa bocas
El francés, uno de los fichajes de Zubizarreta que levantó más suspicacias en la directiva del Barça, está firmando un rendimiento notable a pesar de la competencia que tiene en la zaga azulgrana
El rendimiento de Jérémy Mathieu está tapando muchas bocas. No sólo por los dos goles decisivos que ha marcado en las dos últimas jornadas de Liga ante el Real Madrid y el Celta de Vigo. En la directiva azulgrana se tenían muchas dudas sobre el central francés. Cómo no, la decisión del ex director técnico del club, Andoni Zubizarreta, de apostar por su incorporación a pesar de su precio (20 millones de euros) y su edad (30 años en el momento de hacerse efectiva su incorporación, ahora tiene 31) fue acogida con mucho escepticismo. No obstante, puede asegurarse que, por lo menos en este caso, y el del meta alemán Marc André ter Stegen, Zubi no iba para nada errado.
El centro de la defensa del Barcelona ha estado en el punto de mira en los últimos años. Era, con mucho, la zona más débil del conjunto azulgrana. Esta temporada, en cambio, es uno de sus puntos más fuertes. Piqué vuelve a brillar, Mascherano aporta anticipación y liderazgo. Ellos son los téoricos titulares. Mathieu, a pesar de las reticencias, es todo un escudero de lujo. Ha jugado sólo dos partidos menos de Liga que Piqué y Mascherano, demostrando ser del todo fiable en sus labores, a pesar de alguna que otra laguna. Por velocidad (se dice que es el jugador más rápido de toda la plantilla, a pesar de que también es un fumador empedernido) puede jugar hasta como lateral izquierdo, una zona teóricamente propiedad absoluta de Jordi Alba.
Es cierto que pierde más balones que Piqué o Mascherano, por poco, pero recupera más que el argentino. En recuperaciones, el líder absoluto de este trío es, sin duda, Piqué. El buen rendimiento de Mathieu ha acabado por dejar con muy pocas opciones a Marc Bartra, a pesar de que el joven defensa lleva ya varios años en el primer equipo azulgrana. El francés, que parecía destinado a convertirse en un secundario de lujo, por el elevado precio que se pagó al Valencia por su traspaso, lo está siendo. Pero por motivos mucho más positivos.