Atlético, Sevilla, Valencia... La 'cantada' de André Carrillo sobre la Liga
El futbolista del Sporting de Portugal, ya fichado por el Benfica, estuvo muy cerca de ser nueva estrella del campeonato español antes de cambiar de equipo.
Si los veranos son un estupendo periodo del año para los aficionados al 'mercadeo', los rumores de fichajes y los cotilleos en el fútbol, uno de los nombres propios que más páginas y espacios en radios y televisiones ocupó el pasado mercado estival fue André Carrillo. El extremo peruano de 24 años, figura emergente de su país, venía de firmar la mejor temporada de su vida en la 2014-2015 en las filas del Sporting de Portugal. Sin embargo, se embarcó en un enfrentamiento personal con el presidente del club lisboeta al negarse a renovar su contrato, que expira el próximo 30 de junio. Evidentemente, quería salir. Y quería hacerlo a un mejor equipo, con mejores prestaciones económicas.
El enfrentamiento derivó en castigo. Carrillo lleva meses apartado de la disciplina del Sporting, pero eso fue algo que sucedió hace bastante tiempo. Para el pasado verano, la situación entre el futbolista y el club portugués ya era muy mala y eso despertó el interés de diversos equipos europeos, entre ellos, tres conjuntos españoles: Atlético de Madrid, Valencia y Sevilla. Los rojiblancos buscaban un extremo desequilibrante, que finalmente acabaron encontrando en la figura de Yannick Ferreira Carrasco. En cuanto a sevillanos y valencianos, el posible fichaje del peruano se alargó como un culebrón hasta los últimos días del mercado.
Carrillo se dejó querer, en parte debido a los consejos que le ofrecía su pareja. Suhaila Jad, conocida en España -aparte de por ser española- por su participación en algunos Reality Shows, intentó que el futbolista escogiese la Liga en lugar de marcharse a otros países que también le ofrecían suculentos salarios, como Turquía o Italia. Pero el jugador se mantuvo firme. Su tira y afloja fue con el Sporting y con todos, y sus altas pretensiones no terminaron de convencer a ninguno de los clubes que andaban tras él.
Finalmente, se descubrió el 'pastel': Carrillo fichaba por el eterno rival del Sporting, el Benfica, a costa de quedarse sin jugar esta temporada pero marchándose libre y cobrando un suculento sueldo. Los equipos españoles actuaron de 'sparrings' a la hora de encarecer al futbolista, que se salía con la suya. Típica historia de fichaje veraniego frustrado.
No obstante, meses después, el pensamiento que carcome a Carrillo es si habrá decidido bien este paso. El jugador no fue convocado por el seleccionador de Perú, Ricardo Gareca, para los próximos encuentros de la blanquirroja, algo que ha sorprendido y bastante en el país. Es ahora cuando empieza a darse cuenta de si hizo bien forzando su rebeldía en Lisboa y, sobre todo, no aceptando las ofertas que le llegaron insistentemente desde España, una oportunidad que quizá no vuelva a pasar para él. Hubiese sido menos dinero, pero más minutos de juego. Carrillo duda. Y ahora deberá esperar al menos todo el próximo curso para intentar volver a despertar el interés de los vecinos de la Liga portuguesa.