El rol de Isco en el Madrid hasta el final: sólo partidos de medio pelo

Si no hay sanciones o lesiones el malagueño será el sacrificado en las grandes citas

El rol de Isco en el Madrid hasta el final: sólo partidos de medio pelo

El regreso de James es agua bendita en la zona noble del Bernabéu. En la presidencia existe el convencimiento de que con el colombinao el Madrid es mejor. El partido ante el Granada hinchó el pecho a Florentino Pérez como pocos. El 'fichaje' del presidente se llevó la ovación de la grada y Pérez se sintió correspondido.

 

El presidente había tenido sus más y sus menos con Carlo cuando le avisó de la llegada de James. Ancelotti no había pedido al colombiano. Su apuesta era Arturo Vidal, mantener a Di María y Alonso. Pero el mejor jugador del Mundial fue el elegido de Pérez.

 

Rodríguez había sido fundamental en los primeros cuatro meses de competición y vuelve a serlo desde ya. El colombiano fue un fijo en el centro del campo, aportando trabajo, movilidad, asistencias (12) y gol (12). Un todoterreno que mezcla a la perfección con todos sus compañeros en el centro del campo.

 

James se ha ido ganando con trabajo la confianza del entrenador del Madrid. Acostado a la izquierda, primero jugó junto a Kroos y Modric. Durante la lesión de Bale, fue compatible con otro jugón como Isco. Y con la baja de Modric, el colombiano mantuvo su despliegue y presencia junto al español y Kroos. James no se toca y Ancelotti lo sabe bien. Tanto como Isco. Carlo medtia dar descanso a alguno de los componentes de la 'BBC' en algún partido sin trascendencia para mitigar el palo al malagueño que tiene claras las preferencias del club. 

 

El nuevo estatus que espera a Isco de aquí al final de temporada apunta al banquillo. La sanción de este fin de semana ha sido la 'excusa' perfecta para perpetrar el cambio. Una decisión que puede marcar el futuro del jugador en el Madrid – el Arsenal ha vuelto a interesarse por su futuro-. Y es que el futbolista y su entorno apuntan a intereses que van más allá de lo deportivo en el concurso de James por delante del español: la millonada pagada por el presidente este mismo verano dificulta la suplencia del colombiano al margen de los meritos de uno y otro.

 

Todo indica que, si no hay sanciones o lesiones -Bale está tocado y podría descansar ante el Rayo-, Isco será el sacrificado en los días grandes, como los que se avecinan en la eliminatoria de Liga de Campeones ante el Atlético de Madrid y las grandes citas en la Liga.