Piqué se convierte en el portavoz del vestuario contra los ataques de Madrid
Hay quien piensa que el central azulgrana está sembrando de cara a su objetivo confesado a largo plazo de alcanzar la presidencia del Barça.
Con Luis Enrique ya entretenido desafiando a la prensa propia en las ruedas de prensa y sin ganas de entrar al trapo con nada que llegue de fuera, Gerard Piqué se ha convertido en el portavoz de la plantilla del FC Barcelona, en el defensor de los jugadores y el encargado de responder a lo que ellos consideran "agresiones constantes" que llegan desde Madrid. De alguna manera Gerard Piqué interpreta el papel que en su momento desarrolló Jose Mourinho en el Real Madrid.
Así se entiende el uso que Gerard Piqué ha hecho en las últimas horas de las redes sociales para defender al Barça de los ataques procedentes de la capital tras lo que algunos han considerado como un "robo" del árbitro al Villarreal ante el Barcelona. Ese "¿Y ahora qué?" referido al penalti dudoso señalado por el árbitro del Real Madrid-Sevilla a favor de los blancos es más que elocuente, como la respuesta furibunda al periodista Pedro J. Ramírez después de que éste reclamara su expulsión en El Madrigal: "“si esto no es expulsión que venga Dios y lo vea. La clara roja a Piqué que el árbitro no quiso ver”. Piqué le ha respondido así: “¿Por qué usted no habla de la primera amarilla? Porque no le interesa. Sáquese la camiseta cuando haga periodismo”.
Piqué parece encontrarse cómodo en su papel de ángel vengador. Hay quien piensa que está sembrando de cara a su objetivo confesado a largo plazo de alcanzar la presidencia del FC Barcelona.