Los "no" al Madrid desde Alemania (esperados) alteran la Revolución Galáctica
El club tiene alternativas, pero el cambio en la plantilla sufriría un viraje de 180 grados con respecto a lo previsto.
En el día de ayer martes, a Florentino Pérez le 'estallaron' dos noticias casi al mismo tiempo y de sopetón: El diario alemán 'Bild' anunciaba la renovación de Robert Lewandowski con el Bayern de Múnich hasta 2021, y poco después, Pierre-Emerick Aubameyang, delantero del Borussia Dortmund y reconocido admirador de los blancos, afirmaba no querer fichar todavía por la entidad merengue porque "por algo ha renovado" con el equipo germano. Se trata de los dos primeros palos serios de dos posibles candidatos a encarnar la Revolución Galáctica que el club pretende llevar a cabo este verano para cambiar su plantilla.
En este medio ya veníamos haciéndonos eco de las últimas noticias que alejaban a Lewandowski del Madrid. Después de iniciar un órdago con varias manifestaciones en las que no ocultó su interés por el equipo blanco, tanto el entorno como el delantero polaco callaron por sorpresa ante los crecientes rumores, y poco después, 'Lewi' abrió la puerta a la posibilidad de renovar. Incluso había provocado que el propio Bayern tuviese que reconocer que la opción del Madrid era posible. Las sospechas en buena parte de la cúpula directiva madridista se han confirmado: todo era producto de una táctica del futbolista para dejarse querer y después obtener un mejor contrato con el equipo teutón. Lo mismo que Aubameyang.
Las opciones que quedan
Ahora, al Real Madrid le toca buscar alternativas para reforzarse en verano y cambiar las piezas de su plantel que estime oportunas, porque estas noticias no quitan que, pese a todo, tanto Lewandowski como Aubameyang fuesen dos candidatos a engrosar la delantera blanca. Benzema necesita un compañero y en este sentido, Álvaro Morata e incluso opciones que hasta hace bien poco parecían inverosímiles, como Zlatan Ibrahimovic, han empezado a ser otra vez vinculadas al conjunto merengue.
Morata, siempre visto en la planta noble del Bernabéu más como moneda de cambio que como alternativa real a Karim, gana enteros para ser el '9' suplente del francés el próximo curso. Recomprarle es una opción segura y ha demostrado en dos temporadas en Italia que todavía no tiene techo en su progresión, y que puede rendir en la élite. En cuanto al sueco, su veteranía y su competitividad son un problema, sobre todo teniendo en cuenta en las consecuencias que supondría juntarle con Cristiano Ronaldo en un mismo vestuario. Pero al mismo tiempo sigue siendo un crack, un goleador contrastado que, además, supondría un claro morbo por su pasado azulgrana y las ganas que siempre demuestra tenerle a su ex equipo. Y un reclamo publicitario enorme.