Gerard Piqué ya trabaja en su estrategia para presidir al Barça en el futuro

Su condición de portavoz del club eclipsa hasta al presidente y al entrenador.

Gerard Piqué ya trabaja en su estrategia para presidir al Barça en el futuro

Los medios de comunicación catalanes parecen haberse puesto de acuerdo en nombrar a Gerard Piqué "portavoz oficial del club". Su rueda de prensa de ayer estuvo cargada de pasión barcelonista y de sentido común: "el Madrid ganó, se le felicita y adelante", "nosotros no nos conformamos con ganar al Madrid para salvar la temporada, como antes, y nuestro objetivo es el triplete"... Piqué sabe explicar lo que el socio y aficionado barcelonista quiere escuchar.

 

Ante eso, el presidente Bartomeu se aleja del pueblo y se limita a espaciar sus apariciones públicas para la prensa extranjera y Luis Enrique prefiere enredarse con absurdas disputas con la prensa mientras el mensaje oficial del club queda desierto. Y ahí aparece Gerard Piqué, que no ha sido elegido por sus compañeros como capitán, pero sí como portavoz, porque saben que nadie les representará mejor ante los micrófonos. Y Piqué triunfa en el barcelonismo cuando habla de la misma manera que enciende al antibarcelonismo. De alguna manera el central se está labrando un porvenir. No lo oculta. Quiere ser presidente del Barça cuando se retire, y está poniendo los cimientos magnificando su condición de culé y ganándose la reprobación del madridismo. Es el camino. Todo está calculado. Nada es gratuito. Piqué está en campaña. A diez años vista, pero en campaña.