El Barça sufre el bajón de juego del peor Messi que se recuerda en el Camp Nou

Algo pasa con Leo Messi, como reza el título de la película. No es normal que en un derroche de humanidad que le devuelve al mundo de los humanos, lleve cinco partidos consecutivos sin ver puerta. Cinco partidos, además, decisivos en la suerte del equipo en el tramo final y más determinante de la temporada, cuando se ventilan todos los títulos.

Messi no consigue un gol con el Barcelona desde el 12 de marzo, hace ya un mes. Fue con la visita del Getafe al Camp Nou, que se llevó seis goles, el cuarto obra del delantero argentino. Desde entonces el Barça ha jugado cinco partidos en un mes. Y no ha marcado ni en el campo del Villarreal, ni ante el Real Madrid en el Camp Nou ni ante la Real Sociedad en Anoeta. Tampoco en los dos partidos de Champions League frente al Atlético que se han disputado dentro de este último mes.

Es cierto que en las temporadas 2006-07 y 2007-08 llegó a vivir dos rachas de siete partidos sin marcar, peores que la actual. Sin embargo, en aquella época Messi era apenas un joven prometedor y su papel no tenía la relevancia que tiene ahora en el equipo porque en aquella época el Messi del Barça, quien llevaba los galones de líder, era Ronaldinho. Lo peor de esta situación para el Barcelona es que si Messi estornuda, todo el Barça se constipa. No parece que Luis Enrique tenga la fórmula para prever una alternativa de juego cuando Messi no aparece.