El panorama decepcionante para Míchel en España tras salir del Marsella
El técnico español está en el mercado y, como siempre, suena para entrenar a muchos equipos, aunque con una particularidad.
A nadie se le escapa que Míchel tiene una aspiración en mente: llegar a convertirse en entrenador del Real Madrid algún día. Como ex futbolista y, casi podríamos decir ex leyenda del club (fue parte activa de la famosa Quinta del Buitre y probablemente el jugador más destacado de la misma junto a Emilio Butragueño) siempre ha dejado muestras de su madridismo y ha admitido que alguna vez le gustaría ocupar el banquillo del Bernabéu. Y para eso lleva años preparándose, aunque con resultados algo irregulares.
No logró triunfar en el Olympique de Marsella, club que ha acabado prescindiendo de él después de una irregular temporada e incluso dejó antes de tiempo un Olympiakos en el que sí estaba cosechando éxitos pero, en general, nunca ha terminado de asentarse en un club grande y ganador, siendo su experiencia en el Sevilla una de las más decepcionantes. Lo cierto es que ser entrenador del Madrid aún le queda lejos. Y pese a que tiene un cartel aceptable, el panorama que se le presenta después de abandonar Francia es algo desolador.
Según los primeros rumores, clubes como Betis, Las Palmas, Getafe, Granada o Levante podrían tenerle como alternativa si cambian de entrenador la próxima campaña. Sigue siendo la 'Liga de los intermedios' (en algunos casos y con total respeto, modestos), alejada de la élite del fútbol a la que aspira a pertenecer como entrenador.
Aunque algunos rumores también le colocan como posible sucesor de Vicente del Bosque al frente de la Selección española, lo cierto es que incluso ese cargo parece lejos para un Míchel que sigue sin encontrar el camino para destacar en los banquillos.