El Barça no encuentra patrocinador: el último agujero negro de su gestión

NIke ha empezado a fabricar las camisetas del FC Barcelona de la próxima temporada sin imprimir sobre ellas el nombre de ningún patrocinador. El contrato con Qatar expira el 30 de junio y a día de hoy no existe ni acuerdo para renovarlo ni una alternativa capaz de pagar lo que vale un equipo que viene de ganar el triplete y que cuenta en sus filas con lo más florido del fútbol mundial que, además, es también el principal reclamo comercial: Messi, Neymar y Luis Suárez.

Sorprende que un club que puede presumir de tener la mejor materia prima del mundo, en el apartado futbolístico, tenga tantos problemas para conseguir un sponsor que pague lo que vale. Es un nuevo error en la gestión del club que viene a sumarse a los numerosos frentes judiciales que no se resuelven con éxito; a las pésimas relaciones institucionales que han derivado en las absurdas sanciones de la UEFA y la FIFA; al desbarajuste económico que ha impedido a Luis Enrique realizar fichajes en el mercado de invierno; a la inadmisible actitud de Neymar ofreciéndose a medio mundo, incluido el Real Madrid; a los errores en la comunicación del club que tienen su punto culminante en la guerra que Luis Enrique tiene declarada a una prensa que supuestamente está ahí para defenderle; el desastre de las secciones, que ha culminado este semana con la lamentable eliminación del equipo de baloncesto en la Euroliga ante un rival con un presupuesto sensiblemente inferior... Hay mucho más.

Y mientras todo eso sucede, Bartomeu presenta el nuevo Camp Nou y advierte que no se pondrá en marcha hasta que la deuda no se rebaje de 290 millones a 200. Renunciando a ingresos como el del patrocinador, del que se esperaba recaudar unos 70 millones, va a ser difícil que el nou Camp Nou se ponga en marcha a no ser que se venda a alguna de las estrellas del equipo.