Vestuario, técnico y directiva: el crack sentenciado en el Real Madid

Lo de Isco no tiene vuelta atrás. A las broncas en el vestuario -Sergio Ramos/Modric- de las últimas semanas, se suma la voz suprema: el Santiago Bernabéu. Con Florentino Pérez bajando el pulgar, el socio del Madrid dictó sentencia: Alarcón no tiene lugar en el Real.

Más pitos que aplausos. Isco se jugaba el ser o no ser en una gran cita. Tras ver la temporada desde el banquillo con la llegada de Zidane, el encuentro del malagueño no enamoró. Dividió al Bernabéu. Y el Real no está para divisiones.

'Zizou' ya ha avisado que, se gane o no la Undécima, habrá limpieza en el vestuario e Isco molesta por mucho más que un juego ramplón. Las críticas internas apuntan a que la máxima preocupación del futbolista estos días pasa más por atar su futuro que por el presente del equipo.

El City, rival de los blancos, lo tiene en cartera, pero también Arsenal y Juventus. Desde las alturas se ha dado luz verde a la decisión de Zinedine: Alarcón no pasa el corte. Hay que hacer lugar a los 'nuevos' y potenciar a los que están. La salida está asegurada ya sea como moneda de cambio en una operación de campanillas de los blancos -Pogba- o en una venta que acerque a objetivos clave al Madrid.