Revelan la última conversación entre Florentino Pérez y Jorge Mendes
Florentino a Mendes: "Espéranos hasta abril, necesitamos ese tiempo para llegar a un acuerdo con Casillas para su salida del club"
El presidente no se olvida de De Gea. Estos días circula por Madrid el contenido de una de las últimas conversaciones mantenida entre Florentino Pérez y Jorge Mendes, representante del actual portero del United, y en la que el protagonista de la misma terminó siendo Iker Casillas.
En la conversación Mendes le pedía a Florentino dar el paso definitivo por De Gea si quería atarlo de forma segura con vistas al próximo año. "Es ahora o nunca, presidente. El Manchester nos ha puesto unas cifras muy buenas para seguir y no podemos dilatar en el tiempo la firma. Es ahora o nunca". Una realidad a la que el máximo mandatario del Madrid habría contestado citando a la situación de Iker Casillas en el Madrid. "Espéranos hasta abril, necesitamos ese tiempo para llegar a un acuerdo con Casillas para su salida del club".
En ese "ahora o nunca" se encuentra ahora el Real Madrid, que sabe que De Gea sólo vendrá si Iker, como todo apunta, abandona la entidad este año -la relación entre ambos es inexistente-. El problema es que Casillas ya ha avisado que no tiene intención de dejar la capital española a cualquier precio: el capitán no quiere irse perdiendo dinero. Su contrato en el Madrid no es fácil de asumir. Sólo ligas menores como la MLS estarían dispuestas a seguir soltando las cifras que percibe en el Real por la vieja gloria que fue. En este sentido, el representante de Casillas ya ha deslizado que la intención es salir del club a coste cero para conseguir una prima de fichaje en la nueva entidad de destino que compense una rebaja de los emolumentos del guardameta y abra el abanico de opciones, incluso a la Premier o Bundesliga, competición de la que el internacional español tiene muy buenas referencias de Raúl.
Sea como fuere, lo que parece evidente es que la marcha de Iker del Madrid no apunta a camino de rosas. Una circunstancia que, dependiendo de los derroteros que termine tomando, de las exigencias económicas del portero y de sus más que seguras filtraciones, puede manchar aún más el adiós de un futbolista muy cuestionado por un amplio sector de la afición.