Los motivos que impulsan a Luis Enrique a rechazar la oferta de renovación
Luis Enrique se siente engañado por Bartomeu y se da de plazo hasta final de temporada para decidir su futuro.
La decisión de Luis Enrique de no responder a la oferta de renovación de contrato que le ha presentado el presidente Bartomeu tiene su razón de ser. Hay muchas cosas que suceden a su alrededor a las que el técnico asturiano no encuentra explicación y empieza a sospechar que su peso específico en el club a la hora de tomar decisiones es nulo. De hecho, Luis Enrique se siente engañado por Bartomeu desde que descubrió que el no fichaje de Nolito no se debió a los problemas económicos que azotaban al FC Barcelona en la época del mercado de invierno, sino a un capricho personal del presidente.
Según está versión, que corre de boca en boca por los despachos del club, Bartomeu no tenía ningún interés en recuperar a un futbolista que pocos años antes salió del club por no dar la talla para el primer equipo. Bartomeu siempre fue de la opinión de que si Nolito no valía para el Barça con 25 años, siendo propiedad del club, mucho menos con 29 y pagando traspaso. La experiencia fallida con Cesc Fàbregas, que resultó un auténtico fiasco después de pagar 42 millones por su recuperación, puso en guardia a Bartomeu, que no es partidario de recuperar a un jugador que en su momento decidieron marchar.
Lo que ha molestado a Luis Enrique no es que Bartomeu tenga una idea prefijada sobre los futbolistas del Barça que se marchan, sino que le hubieran engañado diciéndole que no había dinero cuando lo que no había era interés por darle satisfacción fichando al delantero que él había pedido. Por cuestiones de este tipo, que no son de su agrado, Luis Enrique ha decidido dar largas a la oferta de renovación y esperar a final de temporada poniendo a prueba a Bartomeu y sus directivos.