Las cosas que aprendimos del Gamper: Todo empieza y acaba en Messi
¿Es eso malo? El Barça demostró lo que es capaz de hacer, para bien o para mal, ante una Sampdoria que hace tiempo que dejó de tener un nombre en Europa.
Hablar de este Barça todavía en construcción es hacerlo de Leo Messi, pues de la inspiración de un futbolista que apaga todas sus depresiones con Argentina regresando para jugar en el Barça depende ahora mismo un conjunto que busca su identidad propia. Y eso que debería recordarla de años pasados, pues no han habido tantos cambios como para que haya que esperar grandes transformaciones. Luis Enrique sigue confiando en los mismos y aunque va buscando acomodo a algunos, todo hace indicar que el bloque que veremos esta campaña no distará demasiado del de la anterior. Pero volvamos a Leo. De las botas del '10' nació todo lo bueno y lo malo de este partido que no pasará a la historia, frente a una Sampdoria que sin hacer nada dejó sobre aviso al equipo culé y dio pistas a un Sevilla aún relamiéndose las heridas de Noruega.
Los goles. Messi lo hizo todo. Dio una asistencia espectacular a Luis Suárez para el gol del uruguayo, participó, fue el mejor, sentó al portero de la Sampdoria en el segundo y marcó un golazo de libre directo para firmar el tercero. La noticia sobre su excelente estado de forma es buenísima pero mala a la vez, si tenemos en cuenta que este Barça es ahora mismo más Messi y más individualidades que nunca. Eso, en un conjunto pensado y concebido para ser coral, no es un buen mensaje. Por cierto, el primer gol de la Sampdoria llegó tras pérdida de Iniesta, cosa rara.
La falta de contundencia. Si el Liverpool demostró que la defensa del Barça no está a un gran nivel, el carrusel de cambios tras el vendaval inicial blaugrana hizo que los italianos dispusieran de ocasiones para marcar. Y así lo hicieron. Para quien no viese el encuentro la sensación será de que fue disputado, cuando simplemente el conjunto visitante se acercó en el marcador a base de disfrutar de la incertidumbre en defensa del Barcelona cuando desconectó, momento que llegó cuando Messi fuese sustituido. No fue grave, pero el Sevilla habrá tomado nota.
Los fichajes. Denis Suárez promete, André Gomes apenas hizo nada y Umtiti estuvo correcto. Probablemente el más voluntarioso fue Digne, que quizá le robe minutos a Jordi Alba durante la temporada. Más que Adriano al menos. Aleis Vidal sigue sin aparecer por gracia de Luis Enrique y Arda jugó de delantero a falta de encontrarle un sitio en un nuevo centro del campo demasiado poblado. Apunta a que tendrá los mismos o más problemas para jugar que el pasado curso.
Las conclusiones. El resumen es que este choque valió para poco, que con Messi en forma todo se hará más fácil al principio pero que da la sensación de que, si habrá un periodo de la temporada en el que el Barça estará más vulnerable, ese será el del inicio, el ahora. Más tarde, cuando los de arriba engrasen la maquinaria, por mucho que haya altibajos en el juego, los puntos y las victorias llegarán de una forma u otra.