La 'bilis' de Piqué sienta como un bálsamo en el vestuario del Real Madrid

El central ha comenzado la temporada muy centrado en el equipo blanco, eso es buena señal, creen en Valdebebas.

La 'bilis' de Piqué sienta como un bálsamo en el vestuario del Real Madrid

Apenas llevamos una semana de competición en la Liga y Gerard Piqué ya se ha convertido en el centro de atención de muchos debates por sus primeras declaraciones polémicas del curso. El central azulgrana atendió a MARCA primero y después a una de sus ruedas de preguntas vía Twitter, y en ambos casos ‘atizó’ sin miramientos al Real Madrid. Ni siquiera estamos en septiembre, y el defensa ya ‘azota’ con su típico carácter, provocando, cómo no, el pique deportivo con la afición madridista.

 

En el mencionado diario, omitió la Undécima Champions blanca con una frase absolutamente lapidaria: “Somos el mejor equipo de este país con diferencia”. También provocó críticas en las redes sociales cuando habló de la victoria madridista por 0-3 en San Sebastián en la primera jornada, diciendo que “la esperaba”. El Barça ha pinchado siempre en sus últimas visitas al estadio de la Real Sociedad.

 

Pique

 

Pero lo más ‘bestia’ estaba por llegar. Un aficionado le preguntaba por sus preferencias de cara al sorteo de la Champions de esta misma tarde en Mónaco, y el azulgrana contestaba con mucha ironía: "un grupo fácil y luego el 3º de Italia en octavos, en cuartos el 8º de Alemania y en semifinales el 4º de Inglaterra". Obviamente se refería al camino que siguió el Real Madrid la temporada pasada para ganar la Undécima, muy criticado por sencillo por su eterno rival.

 

¿Cómo se han tomado estas cosas en el vestuario del Madrid? Con la calma más grande del mundo. En el club ya están acostumbrados a este tipo de provocaciones deportivas por parte de Piqué, y no le dan importancia. Es más, creen que si a estas alturas ya están así es porque el arranque del equipo merengue ha sido bueno e incluso que asusta, sobre todo por la normalidad que le ha puesto la entidad al hecho de no hacer fichajes y confiar en los jóvenes.