2-3: Cristiano sigue creyendo que la Liga es posible para el Real Madrid

Gran noche de fútbol en Sevilla. Importantísima victoria del Real Madrid que salva así uno de los partidos más difíciles de aquí al final. El pleno de Ancelotti todavía es posible. Enfrente un Sevilla que nunca tiró la toalla. Por algo el equipo de Emery está donde está en la clasificación. Y por algo su estadio es casi inexpugnable. Pero hoy era el día de Cristiano Ronaldo. De nuevo un hat-trick dio los tres puntos a los suyos, pese a los goles de Bacca e Iborra.

El ambiente antes del partido fue espectacular. El Sánchez Pizjuán lleno a capela cantó el himno del Sevilla en una tarde noche que se prometía de gran fútbol. Y lo fue. El Sevilla sueña con la Champions y al Real Madrid sólo le valen victorias de aquí al final. Jugó Sergio Ramos en el centro del campo, como anticipaba Ancelotti en la previa, y Bale no fue de la partida, aunque salió en el momento clave. De nuevo los blancos con el 4-4-2 alternativo.

El Real Madrid salió a por el partido desde el pitido inicial. Sabían lo que se jugaban y más tras la goleada del Barcelona en Córdoba. Un traspié en el Pizjuán sentenciaba la liga. Tuvo el dominio del balón ante un Sevilla que el primer cuarto de hora no consiguió salir de su campo. La medular era de los blancos, con Sergio Ramos que movía bien el balón junto a Isco, y con un Cristiano que se mostró desde el principio muy activo.

Llegado el cuarto de hora los locales intentaron salir del dominio visitante. Aleix Vidal se quedó sólo ante Casillas pero estuvo lento, como si pensara que su posición no era la correcta. Y llegó la jugada que marcó la primera mitad. Una pelota en el centro del campo a la que saltaron Sergio Ramos y Krychowiak. Se golpearon la cabeza y el polaco tuvo que salir a la banda con sangre en la nariz. Los cinco minutos que estuvo atendido por los médicos intentando cortar la hemorragia se hicieron larguísimos para Emery. Nervioso desde la banda se temía lo peor. Y llegó. Cristiano hizo doblete, en el 35 y un minuto después. Dos remates en el centro del área que adelantaron a su equipo y silenciaron el estadio.

Krychowiak salió de nuevo pero entonces su equipo perdía por dos goles. El Sevilla se mostró muy tocado, pero con el paso de los minutos fueron recuperando el tono. Cuando ya todos pensaron en el descanso llegó la jugada que volvió a abrir el partido. Incomprensible penalti de Sergio Ramos a Vidal pegado a la línea de fondo, donde ya no había peligro. El enfado de Ancelotti fue monumental. Bacca lo aprovechó y consiguió recortar distancias sin tiempo para más.

Tras el descanso el Sevilla se fue a por el partido, pero sin mucha convicción. El Real Madrid aguantó bien atrás y siguió buscando el dominio del balón. Chicharito se fue en el 65 y entró Gareth Bale. No fue la noche del mexicano. El galés regresaba tras su lesión y casi en el primer balón que tocó puso un centro medido a la cabeza de Cristiano Ronaldo que con un remate espectacular mató el partido. Hat-trick del portugués que suma ya 42 goles en lo que va de Liga y vuelve a hacerse con el liderato del pichichi.

Parecía que el partido estaba acabado, pero Iborra a pase de Aleix Vidal consiguió el segundo del Sevilla. Una vez más salió la garra de este equipo que disputa los partidos hasta el pitido final. Emocionantes los últimos diez minutos en los que Nervión volvió a ser una caldera. El público entregado a los suyos que creyeron en el empate hasta el final. Pero no pudo ser.  Desde marzo de 2014 no perdía el Sevilla en su estadio. Así acabó la racha.