Indignación en el Barça por la tarjeta a Messi y el trato de favor a Cristiano

Crece la convicción de que existen consignas arbitrales para perseguir al argentino y beneficiar al portugués.

Indignación en el Barça por la tarjeta a Messi y el trato de favor a Cristiano

El vestuario del FC Barcelona era un clamor anoche al término del Sevilla-FC Barcelona por la tarjeta amarilla recibida por Leo Messi después de que el defensa sevillista N´Zonzi le arreara una patada de tarjeta que le sacó la bota y se la rompió. Leo intentó colocarse de nuevo la bota y el árbitro entendió que estaba perdiendo el tiempo -qué poco conoce a Messi-, aprovechando para sacarle una tarjeta amarilla.

 

El hecho recuerda a lo sucedido el pasado año en Valencia, cuando Messi recibió un botellazo en la cabeza, con el árbitro a un metro de la escena, y vio tarjeta amarilla por el mismo motivo: perder tiempo. Entonces, Messi palpaba su cráneo para comprobar si tenía sangre.

 

La indignación entre la expedición del Barça era mayúscula porque por la mañana los jugadores tuvieron la oportunidad de apreciar el trato de favor que Mateu Lahoz tuvo con Cristiano Ronaldo, que le insultó a la cara y sólo vio por ello la tarjeta amarilla. Un insulto del portugués vale lo mismo que Messi atándose la boca. El doble rasero de los árbitros con el Barça y con el Real Madrid empieza a preocupar en el vestuario del Barça, que considera que Jaime Latre se inhibió ante las entradas de algunos jugadores sevillistas en la primera mitad que no merecieron castigo y encuentra surrealista la sanción a Messi, especialmente porque si en realidad consideraba que estaba perdiendo el tiempo, allí estaba él para alargar el partido lo que hiciera falta.