El Valencia tiene un problema a resolver con un jugador antes de fin de año

Al director deportivo che se le acumula el trabajo para el mercado de invierno.

El Valencia tiene un problema a resolver con un jugador antes de fin de año

Peter Lim ya tiene bien claro que tanto Césare Prandelli como Suso García-Pitarch apretarán estas Navidades para realizar al menos dos fichajes en el Valencia. El italiano, que de cara a los medios de comunicación no hace más que asegurar que sólo piensa en los jugadores que tiene ahora mismo en plantilla, quiere y necesita un delantero centro goleador que resuelva los problemas de finalización del equipo che, y también un centrocampista más que haga mejorar al equipo en cuanto a la creación.

 

Las contrataciones dependen enteramente de que se resuelvan los distintos problemas económicos que tiene entre manos la entidad ahora mismo, con la multa de la Unión Europea como tema más importante. Pero también el Fair Play financiero y ciertos casos concretos con jugadores valencianistas que no cuentan para el club, y a los que el director deportivo debe dar salida como sea. Uno de ellos es Fede Cartabia, que muy probablemente volverá al Deportivo de la Coruña. Otro, el brasileño Vinícius Araujo.

 

Araujo

 

Araujo llegó al Valencia en enero de 2014 como apuesta del ex director deportivo Rufete, y desde el principio demostró ser una equivocación absoluta. Apenas sumó minutos con el primer equipo esa temporada, y ha estado cedido en diferentes conjuntos desde la siguiente campaña hasta la actualidad, siempre buscando relanzar una carrera deportiva que ha ido cayendo en picado. Standard de Lieja en Bélgica, Cruzeiro y ahora Sport Recife en Brasil, equipos donde tampoco está explotando a pesar de tener solo 23 años.

 

Ahora, el próximo 31 de diciembre, Araujo regresará a un Valencia donde no tiene sitio. Y por ello, uno de los problemas más importantes a resolver antes de fin de año para García-Pitarch será volver a buscarle acomodo, a ser posible con una venta y no con una cesión. El chico costó más de 3 millones de Euros en su día, y ahora se ha convertido en uno de esos fichajes que nunca nadie supo explicarse. Lo más curioso de todo es que es delantero, precisamente la posición que más urge reforzar al Valencia.