El Barça trabaja para devolverle al Real Madrid la jugada del caso Figo
Bartomeu negocia un bomba electoral que le asegure la reelección a la presidencia del Barça
Ángel di María busca cobijo en Europa. Y el Barça le ha abierto la puerta de par en pare. El Manchester United anunció esta semana el fichaje de Memphys Depay, extremo holandés del PSV Eindhoven de 21 años, por 27,5 millones de euros. Su llegada asegura a los 'diablos rojos' uno de los futbolistas con más proyección de Europa y coloca a Di María en la puerta de salida.
De hecho el pasado fin de semana Louis Van Gaal ya dejó entrever su malestar con el jugador. "Le falta adaptación", comentó en sala de prensa ante su reiterada suplencia. El argentino suma ya seis visitas al banquillo consecutivas pese a ser el fichaje del año, pese a haber costado casi 80 millones de euros y cobrar ocho netos por campaña.
El problema es que el 'Fideo' no ha dado el rendimiento deseado, un rendimiento acorde a semejante inversión. En lo que llevamos de temporada, ha jugado 'sólo' 30 partidos, con cuatro goles en su haber y 11 asistencias. Son guarismos alejados de los que solía sumar en el Real Madrid. El curso que menos goles hizo anotó siete. En lo que a asistencias se refiere, el de Rosario jamás bajó de los 11 pases de gol que ahora acumula. Una dinámica, negativa, que no ha pasado por alto en Barcelona donde quiren pescar en río revuelto.
El presidente del FC Barcelona, Josep María Bartomeu, ha dado órdenes a los suyos de hablar con Jorge Mendes, agente de Di María para sondear la llegada del aún jugador del United al Camp Nou com baza electoral.
La llamada del FC Barcelona preguntando por la situación del argentino habría encontrado respuesta: el club tira el anzuelo y propone a Mendes el mismo ‘entente’ que con Paul Pogba/Mino Raiola: atar al contratación del jugador para 2016 y poderlo lucir como trofeo en la campaña. Una operación que quedaría condicionada a la victoria de la candidatura de Bartomeu en las urnas y que sería previamente pagada a jugador y United y que debería agunatar al futbolista hasta enero. Algo que ya hiciera Laporta en su día con David Beckham, quien terminó en el Madrid. O Luis Figo con Florentino Pérez en su primer asalto al Real.
Bendecido por Messi
A esto, habría que sumar que Messi también estaría presionando para que el club se decida a cerrar la operación. Messi ya puso especial énfasis en la adquisición de Sergio Agüero. Con el ‘Kun’ se buscó una aproximación sin fraguar debido a que el Atlético de Madrid boicoteó su deseo de firmar por el Real Madrid y lo traspasó con celeridad a Inglaterra. Y ahora ha dejado caer que Ángel di María sería un complemento extraordinario para el centro del campo azulgrana. Una idea que el buen amigo de Leo abrazaría sin dudar.