El chivatazo de Luis Enrique que revoluciona el vestuario del Barça
El técnico azulgrana volvió a rozar el ridículo en San Mamés
En el punto de mira. Luis Enrique no cae en gracia. El técnico del Barcelona cuenta sus últimos meses en la entidad. En el vestuario azulgrana corre como la pólvora un chivatazo que va camino de convertirse en una verdad inamovible: el asturiano tiene decidido abandonar el barco a final de temporada.
Los pesos pesados del Barça agradecen los servicios prestados a ‘Lucho’, pero coinciden en que el ciclo del técnico al frente del Barça debe tocar a su fin. El señalado lo afirma.
La falta de recursos tácticos, rotaciones injustificadas, inventos, la nula capacidad para contrarrestar al rival desde la pizarra como evidenció una vez más, en esta ocasión en San Mamés, o unos fichajes que, a excepción de Umtiti, tienen a los capos de la plantilla de uñas, liquidan a 'Lucho'.
Los buenos resultados han mantenido las bocas cerradas, pero las primeras grietas del nuevo curso hacen saltar la banca: el equipo no traga a Luis Enrique y no es de hoy.
Cuentan desde dentro que el asturiano es un gran alineador, pero un técnico muy justito. Messi, Piqué, Luis Suárez, Busquets, Iniesta Rakitic son algunas de la primeras espadas que prefieren separar sus caminos con el asturiano el siguiente curso.
Luis Enrique termina contrato en junio de 2017 y salvo milagro en forma de ‘doblete’/’triplete’ no seguirá. Es más: ‘Lucho’ estaba en la calle en su primer año como técnico del Barça por petición de la plana mayor del equipo. Sólo la Liga, Copa y Champions lo mantuvo en el cargo.