Real Madrid/Morata sirven en bandeja de plata la quinta Champions al Barça

El Real Madrid no sólo no estará en la final de la Champions, sino que ha visto como un ex madridista, Morata, ayudado por el Real, servía en bandeja de plata la quinta Champions al eterno rival, el Barcelona: visto lo visto en el Bernabéu lo de Berlín apunta a festival en azul y grana.

La Juventus se cuela en el último partido de la máxima competición de clubes por capricho de un Madrid que ni pudo, ni supo sacar partido de las carencias del cuadro juventino que dejó al aficionado culé más que tranquilo con vistas al choque definitivo.

Los de Allegri han hecho del pundonor y la brega su mejor arma. Después de esto, nada. Desde Bufón, entrado en años, a Tévez, lejos del que fue, el conjunto italiano presenta un once pelado. Con mucha ilusión, sí, pero sin los galones que pueden marcar la suerte en un gran cita.

Para los turineses llegar a la final ya era y es un premio en mayúsculas. Línea por línea, en calidad, y capacidades, la Juve está a años luz de un Real que demostró, una vez más, que llega muerto al tramo final de curso, justo cuando se reparten las notas, los aprobados y suspensos. Mala cosa. Porque el equipo de Ancelotti ha empujado como nadie a la ‘Juve’ hasta la final. Más que mérito de los visitantes, el demérito fue del Madrid.

Morata se bastó para sacar los colores a un modelo, el blanco, que chirría, y colocar al Barça a un paso minúsculo de su quinta ‘Orejona’. El Real le echó una mano. Hay que jugar, pero sobre el papel y fuera de él, lo del 6 de junio apunta a ‘sarao’ en Barcelona por todo lo grande.

El juego ramplón, cansino, sin ideas, hermético, limitado, pobre, soso de la Juventus no invita a la macahda y deja al aficionado culé durmiendo a pierna suelta hasta la cita. Ni Pogba pareció valer los 100 kilos que piden alegremente los italianos, ni Cristiano, Bale y compañía demostraron el caché que se los supone.

Sólo el orgullo de Casillas en uno de sus últimos partidos como madridista salvó al Real de un escarnio mayor. Año en blanco. Sin Liga. Sin Champions. Y sin Copa.

A Florentino Pérez se le ha girado trabajo en los despachos. Ancelotti no seguirá. Y el rosario de altas y bajas empieza desde ya. En Barcelona ya ha empezado la fiesta. Paga el Madrid. La Juve será la invitada.

Video: Real Madrid 1 - Juventus 1