La jugada de Ancelotti al Real Madrid. Lo que hay tras el "quiero seguir"

A la vista de las muestras recogidas del historial de Florentino Pérez -Nunca ficharé a David Beckham: 'never', 'never', 'never', y lo ficho. Terminan las negociaciones por Ronaldo con el Inter, y fichó por el Real. Cubriremos el Bernabéu, y sigue sin cubierta. Y etc.- poca credibilidad tenía y tiene su anuncio de hace escasos meses: "Ancelotti seguirá en el Madrid pase lo que pase".

Carlo Ancelotti ya sabe que es esto del Madrid. En el Real, como en el Barça y en los grandes, todo va muy rápido. Y sólo cuenta el presente. De estar arriba a bajar en picado. La palabra caduda. Y las promesas no se mantienen.

Real Marid y Carletto llevan semanas buscando la mejor salida para el técnico italiano y club. Para Carlo la solución es una: pagar lo que le resta de contrato para salir libre destino AC Milan. El italiano no piensa perdonar un solo euro y aún menos presentar la dimisión como le ha pedido Pérez que lo eximiría de pagos. "Quiero seguir", soltó Carlo sabiendo lo que hay en juego.

El presidente no ha variado un ápice su criterio/pensamiento con respecto al italiano desde enero. Carletto es fiambre en el Madrid desde inicio de año. Ni la Champions le habría salvado.

Una posición que es respaldada por varios miembros de la Junta que desean dar un giro al banquillo del Real con vistas al nuevo curso. Para estos directivos el Madrid necesita un técnico con más personalidad que paralice la autogestión de una plantilla que dirigen los pesos pesados del vestuario con la connivencia de Carletto.

El crédito de Carlo en el Real terminó en enero. Las voces -las hubo siempre- más críticas de la cúpula del club con la labor del entrenador italiano son compartidas por un Florentino Pérez que busca la mejor fórmula para sacarse de encima a Ancelotti antes del 30 de junio sin que eso pase factura a su persona/palabra dada.

En el Real las cosas están claras. En la zona noble Emilio Butragueño, portavoz del club, no quiso ratificar al técnico. En Canal+ le preguntaron en dos ocasiones, pero el 'Buitre' regateó la pregunta como en sus buenos tiempos de futbolista. "Todos estamos tristes, lo demás es secundario", dijo.

Lo 'demás' ya se negocia. En silencio. Con discreción. Y con los cuchillos sobre la mesa.