Las interioridades del Madrid: lo que le espera a Casillas si decide seguir
El club le tiene reservado un papel nada cómodo para la temporada 2015-16
Iker Casillas ha puesto sobre la mesa del Madrid dos opciones. Primera, pagar los 26 millones limpios que solicita para coger la puerta y desaparecer. O segundo, quedarse hasta final de contrato -2017- en el Real.
Florentino responde. El presidente no quiere llenar los bolsillos al portero y pide una rebaja al representante de Iker, Carlos Cutropía, para llegar a un entente. Un, ni par ti, ni para mi. En caso contrario, avisa: Casillas no volverá a jugar un partido más en la Champions con el Real Madrid. Será el suplente del que venga -De Gea- en la máxima competición de clubes y la Liga. Las funciones del capitán quedarán reducidas a la Copa.
Este el mensaje que han mandado desde las alturas a Iker y compañía. La participación de Casillas en Europa pasaría, únicamente, por lesión/sanción. No habrá minutos ni en partidos de medio pelo en fase de grupo. Su rol será el mismo que ha vivido y tragado Keylor Navas hasta la fecha en el Real.
¿Orgullo o pesetero?
Si por Iker Casillas fuera no seguiría ni un día más en el Madrid. El guardameta piensa que su etapa en el club blanco ha finalizado y no quiere continuar escuchando pitos en el Santiago Bernabéu al que aborrece. El desencanto de Iker con el Madrid/madirismo es total. Pero el capitán tampoco va a ceder a presiones. Es una cuestión de orgullo, no de dinero, afirman desde el entorno de Iker: aceptar un rebaja en su salida, es aceptar que Pérez y compañía tienen razón. El problema de Casillas con el Real lo tiene el Real y no al revés. El capitán no quieres irse. Es el club quien le invita a salir. Y en ese caso el razonamiento es lógico: sino me quieren, que paguen lo estipulado y listos.
Sea como fuere, la guerra fría entre Casillas y el Real Madrid apunta al verano. El presidente no cede ante las ansias económicas de Iker y se lo piensa. Florentino Pérez alucina con la manera en la que el capitán está exprimiendo al club en su etapa final.
Desde la zona noble del Bernabéu no entienden como un jugador que ha sido referente en el Madrid está ensuciando así su nombre en la entidad. La fama de pesetero corre como la pólvora por el club/grada que advierte que el gran drama para Iker es que ninguno de los grandes de Europa cubre sus expectativas económicas, por lo que es innegociable para el guardameta percibir íntegramente las cifras dispuestas con el Madrid.