Las claves que empujan a Isco a irse del Real Madrid: Rafa Benítez
El entorno del malagueño desconfía de las intenciones del técnico madrileño
La situación de Isco en el Real Madrid nunca ha sido de vino y rosas. El malagueño ha encajado mal su rol secundario en el equipo desde que puso un pie en el Bernabéu. Este tramo final de temporada ha sido un verdadero quebradero de cabeza para el andaluz: se siente decepcionado por una plantilla que ha afirmado internamente que prefiere el concurso de James Rodríguez antes que el suyo y no dudó en recordarle a Carletto una de sus proclamas más famosas cuando dirigía al Real: "Siempre que esté bien, Isco va a jugar". No fue así.
Tras conocerse la recuperación de Rodríguez desde la directiva se dio la orden de potenciar/ posicionar a James en detrimento de Isco. El mensaje fue enviado debidamente por los emisarios del presidente a un Carletto que tragaba con la última imposición/recomendación.
Una petición que vivió un segundo capítulo tras el traspié de Modric. El croata caía lesionado y apuntaba a baja hasta final de temporada. Ante la duda de si dar galones a Isco o James la misiva desde el club volvió a ser clara: James Rodríguez.
Carletto dio luz verde al operativo y el colombiano recogió el guante en el campo: adelantó a Isco convirtiéndose en el verdadero líder del equipo, el jugador más en forma y más destacado del tramo final. Y relegando a Alarcón a una suplencia de la que sólo lo han rescatado las lesiones o sanciones.
James se ha convertido en la piedra angular de la zona noble del Bernabéu. La directiva le ha dado el mando en la zona ancha del campo y Rodríguez ha respondido. Una realidad que no ha pasado por alto al perjudicado, Alarcón, que conoce de primera mano las preferencias del 'jefe' y los suyos por James.
La entrada de Isco en el once del Madrid ha pasado a ser el de escudero de Modric, James y Kroos. El malagueño se saber por detrás de los tres en las preferencias de la directiva y en las de un Rafa Benítez que es la prolongación del pensamiento de Pérez en el campo: desde el entorno del jugador existe la sospecha que la elección de Rafa responde, precisamente, a los deseos de Florentino de seguir moviendo los hilos del vestuario: Benítez no irá contra el 'jefe'. Habría pagado por entrenar al Madrid. Desde las alturas le han aleccionado muy bien. Sabe como funciona el club. Y sabe cual es el único camino para hacer carrera en el Real.
El tramo final de campaña ha pasado factura Isco en los despachos. Florentino ha deslizado mensajes de aviso por las 'rabietas' de Alarcón en suplencias. Los gestos del jugador públicos/privados no han sentado nada bien en la zona noble donde no han dudado en incluir su nombre en operaciones de mercado. Isco ha dejado de ser un intocable para el presidente. Y Rafa no se opondrá a esa idea.
El ex del Málaga quiere decidir su futuro y va a coger el toro por los cuernos desde ya: tiene previsto entrevistarse con Benítez en los próximos días para conocer de primera mano los planes del técnico. Todo lo que pase por continuar como el curso pasado llevará a Isco a hacer el petate.