Los primeros conflictos de Rafa Benítez en el vestuario del Real Madrid
El técnico tiene 'patatas calientes' en todas las líneas del equipo
A Rafa Benítez le caen gotas de sudor. Al técnico se le está girando trabajo. Los problemas del Madrid del futuro pasan por resolver los dramas presentes. Patatas calientes que queman sobre la mesa del técnico. A saber.
Portería. Casillas no quiere salir. La llegada de De Gea avisa de un año movidito en el vestuario blanco. Iker se niega a aceptar cualquier opción que no pase por la continuidad o la salida pagada hasta el último céntimo y ni así: las ofertas por Iker no mejoran lo existente. Desde el club se afirma que si Casillas sigue en el Madrid es porque no tiene nada mejor: los grandes le cierran la puerta y los pequeños son un desprecio para el capitán. Los mediano no pueden ni quieren pagar lo que pide el portero en la recta final de una carrera en evidente declive. A todo esto, Keylor Navas ha sido ratificado -por el momento- como segundo: desde el club confían en forzar la marcha de Iker y cerrar la dupla De Gea/Navas. De no ser así habrá que decir lo de donde dije digo, digo Diego y darle las gracias a Keylor por todo.
Sea como fuere, el problema es mayúsculo: Iker lleva muy mal el rol secundario y la convivencia apunta a infierno.
Defensa. El drama tiene nombre y apellidos: Raphael Varane. El jugador no confía en el proyecto Benítez y ha pedido al club blanco su salida al Chelsea. Sergio Ramos, por su parte, tampoco lo pondrá fácil: ha sido el 'capo' del vestuario con Ancelotti y no quiere perder su estatus. Su 'no' renovación complica aún más un personalidad ya difícil de por sí en la caseta. Carvajal no quiere ser suplente. Y Coentrao se aferra al puesto.
Medio Campo. El dilema se debe al superávit que se prevé con el panorama de salidas y entradas. Khedira se ha ido pero ha llegado Casemiro. La opción de fichar a un mediocentro de relumbrón añade un jugador más, a falta de saber qué se hará con Lucas Silva, puesto que Illarramendi podría continuar. Isco no quiere quedar en jaque y pone ofertas de la Premier sobres la mesa. Ocho jugadores para tres plazas en el once inicial.
Delantera. La BBC no va. Los cambios de Benítez para reactivar el ataque del Madrid están levantando ampollas. Cristiano se niega a ejercer de '9' en favor de Bale -intocable- y Benzema ve como el movimiento lo puede relegar al banquillo y ya ha puesto su salida sobre la mesa del club. Convencer a Ronaldo -que desconfía abiertamente de Rafa y su proyecto- será un reto mayúsculo.