El Real Madrid tiene al Kun Agüero metido dentro del bolsillo
El club blanco necesita liberar una de las plazas de ataque
Agüero apunta a culebrón del verano. El Real Madrid ha movido ficha y ha comunicado al Manchester City su interés formal por el fichaje del Kun. La respuesta del club 'citizen' ha sido que el argentino no está en venta. El Real pone sobres la mesa inglesa hasta 90 millones de euro para forzar la posición, pero el club de Manchester ni necesita el dinero, ni lo quiere. El jeque que mueve los hilos en la entidad ha dado órdenes de colocar una cheque en blanco sobre la mesa de Agüero para que se olvide del Madrid. Pero el problema del City es que el Kun no quiere dinero: el Madrid le pone sobre la mesa el mismo cheque y además le ofrece algo que en Manchester escasea: títulos.
Agüero no quiere dinero, pide reconocimiento. Volver a la primera línea. El argentino ha visto como su paso por el City no le ha encumbrado a las alturas. El club inglés vive de la chequera pero dista mucho de ser un equipo ganador. En Manchester alternan los claros y las sombras. Y es por ahí por donde el Real ha encontrado su resquicio: trabajan el ego del jugador. Un futbolista que busca recuperar la gloria perdida desde que aterrizó en la entidad 'citizen'. Y que espera órdenes del Madrid para poner sobre la mesa del City su voluntad de salir rumbo al Bernabéu.
Una operación que el conjunto merengue podría abordar más allá de la salida o no de Karim Benzema, el gran favorito en todas las quinielas para liberar un puesto en el ataque blanco. El francés tiene ofertas del United/Arsenal/Liverpool y PSG. Y el Madrid no tiene dudas: tasa al jugador en 50 millones. Si alguien pone esas cifras sobres la mesa, no habrá discusión.
Agüero le costó al club inglés 45 millones de euros en 2011 cuando le fichó del Atlético de Madrid y la primera propuesta del club blanco ya dobla esas cifras. Pellegrini lo quiere. El City lo quiere. Pero el Kun no desea seguir en Manchester: una ciudad que aborrece. Echa de menos su vida en España. Y va como loco por regresar. El atacante ya estuvo a punto de convertirse en jugador blanco en 2011 pero al final se fue a las filas del club ‘citizen’ para evitar entrar en conflicto con el Atlético de Madrid. Ahora vuelve a abrirse una nueva ventana.