El día de locura en el Barça: un 'bombazo', un drama y un escándalo para cerrar el mercado
En el club no sólo se trata el tema Coutinho: hay más asuntos pendientes (y mucha prisa para cerrarlos).
Este viernes se avecina día complicado en el Barça. El conjunto azulgrana afronta el último día de mercado de fichajes con muchas, demasiadas seguramente, operaciones por realizar. Los azulgrana no han sido capaces de completar los fichajes deseados tras la marcha de Neymar y llegan a estas últimas horas antes del cierre con los casos de Coutinho y Di María sobre la mesa y cada vez menos opciones de salir victoriosos. Hay planes alternativos, que igualmente se hacen cada vez más complicados. Y sobre todo, muchos problemas también para cerrar las salidas, muy necesarias para hacer hueco.
El 'Bombazo' del día sería, pese a todo, la llegada de Coutinho. Desde Inglaterra se sigue insistiendo en que todo está casi a punto, pero las dudas crecen desde que anoche, momento en el que cerró el plazo para fichar en Inglaterra, Alemania, Francia e Italia, ni el Barça pudo incorporar oficialmente al brasileño, ni el Liverpool cerrar al que iba a ser su sustituto, Lemar. El extremo del Mónaco ha preferido quedarse en el Principado y eso hace muy complicado que salga un Coutinho que sigue teniendo esperanzas.

El drama se llama Arda Turan. El Barcelona está siendo incapaz de colocar al turco, que además no quiere irse, según algunos medios informados de la actualidad azulgrana. Precisamente, el Mónaco parece que ha sido el último equipo en interesarse por el otomano, que se resiste a abandonar Camp Barça.
Los culés tienen 24 horas para dejar salir a Arda, si es que llega alguien. Como tienen ya menos de 24 horas para terminar de cerrar la salida de Munir, que ha sido ofrecido a clubes tan variopintos como Betis, Málaga o Torino. Por si fuera poco, con Rafinha también habría dudas. El medio campo del equipo de Ernesto Valverde tiene demasiados efectivos y busca incorporar más, con lo que todo tiene que hacerse este viernes o asistiremos a un 'Overbooking' que derivará en nuevo escándalo para una directiva que vive en el alambre ante sus aficionados.